tag:blogger.com,1999:blog-63713819209800361172024-03-08T06:45:28.022-08:00Dr. Juan Eduardo Romero (Venezuela)Página personal del Dr. Juan Eduardo Romero, Docente e Investigador de la Universidad del Zulia- Venezuela. Historiador especialista en procesos Políticos Contemporáneos. Profesor Invitado en España, Argentina, Colombia, Ecuador, Francia, Alemania, Italia, Brasil. Miembro de la Red de Estudios de Seguridad y Defensa de América Latina (RESDAL), Miembro de la Asociación de Historia Actual (AHA). Teléfonos (58) 412 6543075 (Móvil), Telfax (58) 261 7596253. E-mail: juane1208@gmail.comHistoriadorhttp://www.blogger.com/profile/06283244937285398987noreply@blogger.comBlogger94125tag:blogger.com,1999:blog-6371381920980036117.post-18666272800850627602021-12-10T19:16:00.000-08:002021-12-10T19:16:39.194-08:00¿Cómo entender los resultados en el Zulia?: un debate necesario.<div class="separator" style="clear: both;"><a href="https://1.bp.blogspot.com/-56XeZY5gTE0/YbQXzA8sUKI/AAAAAAAAunM/VIMKLRg3RDs2dSCWWOS9m4Fx8E0T4fUSwCNcBGAsYHQ/s696/rosales-y-maduro-696x467.jpg" style="display: block; padding: 1em 0; text-align: center; clear: left; float: left;"><img alt="" border="0" width="320" data-original-height="467" data-original-width="696" src="https://1.bp.blogspot.com/-56XeZY5gTE0/YbQXzA8sUKI/AAAAAAAAunM/VIMKLRg3RDs2dSCWWOS9m4Fx8E0T4fUSwCNcBGAsYHQ/s320/rosales-y-maduro-696x467.jpg"/></a></div>
Dr. Juan Eduardo Romero/ Historiador y politólogo/ Docente de la Universidad del Zulia/ Diputado de la Asamblea Nacional de Venezuela 2021-2025
Los resultados electorales del pasado 21N, nos obligan a generar un debate riguroso y de altura sobre lo sucedido. Dijo en algún momento Mao Tse Tung lo siguiente, a propósito de derrotas y victorias “Luchar, fracasar, volver a luchar, fracasar de nuevo, volver otra vez a la luchar, y así hasta la victoria: ésta es la lógica del pueblo, y él tampoco marchará jamás en contra de ella.” Mucho se ha escrito en redes y grupos, y todo insiste en lo mismo: la búsqueda de culpables. Creó no se trata de eso, porque al final, todos los que tuvimos responsabilidad de conducción – desde la Dirección Política regional, Municipal y Parroquial, hasta los responsables de comunidad, calle y UBCH- somos padres de esta derrota, lo que pasa es que ninguno quiere asumirla, por aquello que la “derrota siempre es huérfana”.
Sin duda, debemos comenzar por reconocer que nuestra maquinaria no funcionó como debía. El debate (y lo presentado por los órganos de conducción electoral) estimaban un contingente de hombre y mujeres, que comparten este proceso alrededor de los 680.000 votos, que sin duda contrastan con las cifras obtenidas en este mismo proceso electoral pero en 2017 (más de 710.000 votos). La pregunta que debemos hacernos, es que sucedió, tanto en el hacer político de dirección como en el comportamiento de los electores, para poder comprender como un pueblo decide optar por un sujeto político señalado (y procesado) por corrupción y malversación de fondos públicos, que estuvo prófugo de la justicia y que en su anterior gestión llevó al Zulia a los 1eros lugares en secuestro, homicidios y extorsión.
Responder esta pregunta no es posible, si no entendemos el contexto social, geopolítico y económico que asumió Omar Prieto en 2017. En términos de contexto social, no puede dejar de señalarse las particularidades del comportamiento electoral del Zulia. Estamos hablando de una entidad regional, que por sus antecedentes de ciudad-puerto y las características de su élite política, siempre ha tenido un comportamiento discorde con el resto nacional. Recordar que esas características es la que hicieron que en 1810 la élite maracaibera, vinculada siempre al comercio transcaribeño y trasnatlántico, no se pronunció a favor del proceso y solo lo hizo, por intermedio del héroe Rafael Urdaneta en enero de 1821, facilitando una maniobra que tuvo incidencia significativa en el triunfo de Carabobo, en junio de ese año.
Pero si lo vemos en términos electorales, el Zulia siempre ha sido un estado opositor. Lo fue entre los años 1958-1998, cuando normalmente (por lo menos hasta 1989), cuando ganaba un Presidente a nivel nacional, en el Zulia perdía. Desde que se iniciaron las elecciones directas de gobernadores y alcaldes en 1989, eso se repitió. Debemos recordar como ganó Oswaldo Álvarez Paz, siendo presidente Carlos Andrés Pérez o como lo sustituyó Lolita Aniyar de Castro en 1993 o el triunfo del propio Arias Cárdenas en 1995, o como ganó el propio Manuel Rosales en el año 2000. En resumidas cuentas, este es un estado muy conservador, relacionado a los patrones socio-culturales de su entorno. Hay una gran tradición de control de la tierra, dadas las enormes potencialidades productivas del Sur del Lago. Lo que bosquejo de entrada, es que el triunfo de Omar Prieto es una excepcionalidad en el comportamiento electoral del Zulia y fue posible, dado a la “fijación” en torno a su gestión como Alcalde del Municipio San Francisco y las prioridades que le otorgó al tema de seguridad e intervención social y económica.
Ahora bien, debemos decir que las condiciones en las que gobernó como Alcalde, no fueron las mismas con las que tuvo en la Gobernación. De entrada, se encontró con un Situado Constitucional reducido a polvo, dada el ataque a la moneda nacional como parte de las condiciones de Guerra No Convencional a las que se enfrenta el Gobierno del Presidente Nicolás Maduro desde 2013 (debo recordar –citando a mi amiga Pascualino Curcio en su Libro Hiperinflación: Arma Imperial- que la depreciación del Bolívar en relación al Dólar entre 2012 y 2018 fue de 105.820.105 %).
Ese ataque a la moneda, hace que un estado como el Zulia, vea reducido sus aportes por situado a niveles terribles. Hay que agregarle, que las propias Medidas Unilaterales Coercitivas (MUC), tienen como epicentro la actividad petrolera y que el Zulia, ha sido tradicionalmente una entidad donde el petróleo ha jugado un enorme papel, desde 1914 cuando comenzó la explotación comercial en Venezuela. Tenemos entonces, un gobierno regional – que insisto, es una excepcionalidad en torno a lo que ha sido el comportamiento electoral- que asume sin capacidad económica, pues ni constitucionalmente (por situado) ni socio-productivamente (por impacto de la industria) tenía capacidad financiera. Aparece así el 1er problema: Gobernar sin recursos. Un estado, que además tiene un vía de escape por la cercanía con Colombia, pero que desde 2018, por el propio papel que juega el Gobierno Colombiano en la agresión no declarada contra el país, ha conducido a una reducción al mínimo posible de un comercio binacional que llegó a estar en un orden superior a los 7.000 millones de US$, en algún momento antes del periodo mencionado.
La Gobernabilidad, entendida como la capacidad para formular y desarrollar políticas públicas se veía comprometida desde el inicio. Una prueba de ello, es que el propio Gobernador Omar Prieto tuvo que iniciar su gestión, afrontando un apagón general de todo el Zulia entre el 23 hasta el 28 de diciembre de 2017. Ello como una consecuencia de las propias características del Sistema Eléctrico Nacional (SEN), cuya estructura cuenta con una extensión de más de 30 años de uso y al mismo tiempo, la demanda energética se expandió como parte de una política de mejora de las condiciones de vida del venezolano, que emprendió el Presidente Hugo Chávez a través del Programa Mi Casa Bien Equipada, que dotó de aparatos electrodomésticos a los hogares venezolanos, aunado al impacto de otro Programa: La Misión Vivienda que ha otorgado vivienda a más de 3.500.000 familias en todo el país. No podemos dejar de indicar, que el SEN depende sólo 18% de la generación hidroeléctrica y que las otras fuentes de generación, están ligadas al gas y al petróleo (34% y 48% respectivamente), y en el Zulia las Termoeléctricas funcionan con gasoil, que depende de la producción petrolera (cuyo recesión por esas Medidas Coercitivas Unilaterales, comprometió en demasía su capacidad de producción, refinación y distribución)
Afirmamos, es que la situación del Zulia, por estar en la “cola” del Sistema Eléctrico Nacional (SEN) aunado a su dependencia de generación de sistemas de gasoil, comprometió las condiciones del servicio desde un inicio. A Omar Prieto, le tocó “gerenciar” no sólo en crisis financiera, sino la peor crisis del servicio eléctrico que ha tenido el Estado, a pesar de no ser una competencia del poder regional, pero asumió esa responsabilidad desde un inicio, en una decisión controversial pero valiente, al ponerse enfrente de un grave problema en términos de servicio público. Por supuesto, no se puede menoscabar el impacto que esto tuvo sobre su gestión, considerando las particulares condiciones ambientales del Zulia, en donde el servicio eléctrico es un tema primordial, dadas las altas temperaturas que caracterizan a la región. Un dato importante, para valorar en todo su peso, las dificultades de gobernabilidad: algunos estudios señalaban para 2015, que el Estado Venezolano destinaba en subsidios directos en gas, gasolina y electricidad más de 51.000 millones US$. Para que entendamos esto en toda su magnitud, debo decir – siguiendo de nuevo a Pascualina Curcio y sus estudios- que las pérdidas productos del Bloqueo Económico entre 2012 y 2020 han sido superiores a los 196.000 millones de US$, llevando la reducción de los ingresos por concepto de exportación de petróleo de ´+69.000 millones US$ anuales a menos de 300 millones.
Tenemos así este elemento de gobernabilidad esencial (servicio eléctrico) seriamente comprometido, sin recursos y con una entidad, donde este servicio es primordial para la calidad de vida de los zulianos. ¿Cuál fue el accionar de Omar Prieto, en esa circunstancia?: dio la cara y emprendió un conjunto de acciones que intentaron solventar la situación. En múltiples oportunidades procuró –junto con los equipos humanos que permanecieron en el país, pertenecientes a CORPOELEC- construir alternativas, bajo condiciones de escasa disponibilidad financiera (tal como explicamos), pero que se dificultan dado el hecho que la generación base que debe disponer el estado, `para poder distribuir lo que llega del Guri (que cubre casi el 80% del requerimiento eléctrico de la Costa Occidental del Lago, que incluye a Maracaibo) es casi 400 MW y dependen del suministro de gasoil. El esfuerzo que se hizo, para alcanzar esa capacidad de carga mínima, implicó el establecimiento de un Plan de Administración de Carga (PAC) desde el propio 2018 y que se incrementó en el 2019.
Paralelamente, se hicieron trabajos destinados a elevar la autogeneración, sobre todo en Termozulia, que para el momento del apagón de 2017 apenas aportaba menos de 100 MW. El mismo esfuerzo se emprendió (siempre en medio de dificultades financieras y burocráticas con CORPOELEC) en Ramón Laguna y el Complejo Rafael Urdaneta, que teniendo capacidades instaladas de generación de más de 650 MW y 230 MW, estaban aportando menos de 70 MW. No podemos dejar de mencionar, los ataques, cortes e incendios a subestaciones claves, como El Tablazo en la Costa oriental del Lago o Cuatricentenario en Maracaibo, que llegaron a producir interrupciones del servicio eléctrico por más de 8 o 10 horas en diversas localidades (y hasta más, dependiendo del sitio). Conclusión: el tema eléctrico que se asumió (entendiendo era una competencia del Poder Público Nacional), tuvo una repercusión muy alta en la percepción de la gestión.
En términos de gerencia pública, esa responsabilidad no corresponde ni al Gobierno Regional ni a los Municipales. No obstante, se asumió y fue una decisión política personal de Omar Prieto. Creó (no lo dudo) que tuvo su impacto en la decisión electoral de algunos zulianos, quienes le adosaban a Prieto una responsabilidad que no le corresponde y que en términos de comunicación política, fue utilizado para “responsabilizar a su gobierno” de los problemas eléctrico.
No puedo dejar de señalar, los esfuerzos que se hicieron y que en mi criterio (no fueron eficientemente comunicados) para buscar fuentes de financiamiento. El propio Gobernador Prieto, acudió ante la Corporación Andina de Fomento (CAF) para solicitar un crédito de más de 350 millones US$ en 2019, para ser utilizados en la puesta óptima del sistema termogenerador. Y debo decir, que el denominado G-4 (Acción Democrática, Voluntad Popular, Primero Justicia y Un Nuevo Tiempo), se negó a través de sus representantes en la Asamblea Nacional, a la aprobación de ese crédito, que en su artículo 14, contemplaba una instancia de control de ese órgano a los recursos que serán asignados. Esto es importante que lo dijéramos, pues los representantes de Un Nuevo Tiempo (UNT) fueron parte de un juego, cuyo objetivo final fue logrado (por lo menos en el Zulia): presentar al Gobierno Regional –en articulación con el Gobierno Constitucional de Nicolás Maduro- como ineficiente e incapaz.
Se asistió a una operación psicológica (OP), que siendo parte del juego político de deslegitimación, rendiría sus frutos este Noviembre del 2021. Debemos asumir críticamente, que nuestra comunicación política de los esfuerzos que se hicieron desde la Secretaria de Asuntos Eléctricos, con el Ingeniero Juan Carlos Boscán a la cabeza, no fueron muy eficaces. Los mismos actores, que en el contexto de 2019 procuraron desconocer el mandato constitucional del Presidente Nicolás Maduro, se articularon para bloquear el otorgamiento del crédito solicitado y que habría puesto totalmente operativo la generación eléctrica en el Zulia y hacerlo menos dependiente del Sistema Eléctrico Nacional (SEN).
Lo sucedido con el SEN es aplicable también a las dificultades en otros servicios públicos. Me refiero a la dotación de agua potable y al sistema de recolección de desechos sólidos. En lo que respecta al agua potable, no podemos dejar de resaltar que la ciudad petrolera de Maracaibo y en general el Zulia, tienen una particular “geografía de poder”, que privilegia a los sectores más solventes económicamente desde finales del siglo XIX pero particularmente desarrollados en el siglo XX. La economía petrolera, consolidó esa exclusión y por ello, con el Gobierno de Chávez se implementaron las Mesas Técnicas del Agua, como una forma de quebrar esa “geografía de poder”, con Hidrolago. Esa estructura de poder, se basa en un hecho de política pública: se planificaron conexiones de agua potable para el centro y los espacios de poder en el Zulia y los sectores populares, quedaron “desconectados” del servicio, por lo que un elemento característico es la dotación a través de “camiones cisternas” particulares, que cada vez encarecen la venta del vital líquido.
Estos camiones, responden a sectores económicos que tienen particular interés en mantener el colapso del servicio y a eso se agrega el hecho, que la red de distribución, como una consecuencia de esta “geografía de poder” es intervenida con tomas ilegales que disminuyen (y comprometen) el caudal y la periodicidad de la llegada del agua a las comunidades. Por otro lado, debemos señalar que las represas de Burro Negro y Machango, ya han agotado su operatividad y se hace necesaria la construcción de nuevas fuentes de acumulación de agua en el Estado. Este es un problema que se heredó de la dinámica de control social promovida por la industria petrolera y que se ha procurado atender a través de la represa de Tres Ríos y la planta de Tratamiento El Brillante. En esto, se contó con la colaboración – como parte de una gestión emprendida por el Gobierno regional de Prieto- de Petroquímica de Venezuela (PEQUIVEN) y PDVSA, quienes colaboraron en la reparación de sendas bombas de agua, para aumentar el caudal que llega a las localidades.
La tensión entre los camioneros cisternas, cuya acción especulativa ataca los ingresos de los zulianos y las estructuras institucionales de administración pública (Hidrolago) fueron notables. Por otra parte, al ser esta estructura parte del Poder Nacional, la relación con el Poder Regional es vital para afrontar su atención. De ahí el logró de reactivación de cuatro (4) líneas de bombeo desde Tulé, como parte de esa acción conjunta, que permitió elevar la disponibilidad a unos 2.800 litros de agua por segundo hacia zonas muy vulnerables del oeste de Maracaibo o atender las necesidades de agua de los Municipios de la Costa oriental del Lago.
No obstante, la solución pasa necesariamente por la disponibilidad de recursos, para crear nuevas represas y puntos de tratamiento de aguas en el Estado, aspecto que se dificulta dadas las condiciones de asfixia económica. Por otro lado, las empresas que pueden ayudar – como lo han hecho con sus limitaciones económicas- a mantener y apoyar en esta infraestructura que acabe con esa “geometría del poder” en la distribución del agua, específicamente Pequiven y PDVSA, se ven muy afectadas por la disminución de su disponibilidad financiera, dados los Decretos de Bloqueo de sus activos y cuentas en el exterior.
No evadimos las dificultades de gerencia del problema del agua que pueden estar presentes, pero si resaltamos las dificultades que se tuvieron que asumir en estas especiales condiciones económicas.
Otro tema de atención en materia de servicios públicos, fue la recolección de desechos sólidos. La infraestructura de recolección de Maracaibo y el Zulia, fue objeto desde finales de los años 90 del pasado siglo XX, de una dinámica de privatización de los servicios, como parte de una acción política enmarcada en la apología neoliberal del momento. En el caso de Maracaibo, las gestiones de Un Nuevo Tiempo (UNT) entre los años 2010-2018 fue particularmente perniciosa al respecto, dejando sin vehículos de recolección y generando una semiprivatización del servicio de recolección. Tanto el Gobierno regional como Municipal, debieron afrontar la urgente atención del problema de la recolección de basura, que sólo en el Municipio Capital genera más de 1300 Toneladas diarias. Las dificultades son múltiples, dado el hecho que esa “geografía del poder” también afecta la recolección y sobre todo, la ausencia de una política de procesamiento y reciclaje de desechos sólidos en el Zulia (y toda Venezuela).
Las gestiones del Gobierno Regional, ante el Gobierno Nacional, aunado a la reforma tributaria permitieron disponer de algunos recursos financieros, para paliar el grave problema de la basura. En estos momentos, se calcula que en la ciudad de Maracaibo están sin recoger unas 30.000 Toneladas, sin ninguna justificación, pues están los equipos , las rutas y el personal que fueron una consecuencia del esfuerzo entre los distintos niveles del Poder Público Nacional (Nacional-Regional y Local).
Este contexto de dificultades económicas, para la atención de estas tres (3) áreas de servicio público (electricidad, agua y basura) es un elemento sobre el cual debemos prestar especial atención, más aún cuando en el Programa de Gobierno de Manuel Rosales , se replantean políticas de privatización, enmarcadas en “alianzas” con la empresa privada.
LOS PELIGROS GEOPOLÍTICOS DE LA NUEVA GESTIÓN EN EL ZULIA
Desde que ocupó inicialmente la Alcaldía de Maracaibo, a partir del año 1995 hasta el 2000, diseño una estrategia basada en el uso de la identidad patrimonial y cultural del Zuliano, específicamente en su orgullo regional. Esa estructura fue bien elaborada y consolidada, desde 1999 con la Fundación del partido político Un Nuevo Tiempo (UNT) con el cual construyó una hegemonía entre el año 2000 hasta 2008, cuando se presenta (nuevamente) como candidato a Alcalde de Maracaibo.
Esa estrategia regionalista, lo llevó a apoyar la promulgación de la Constitución del Zulia, que motivó un recurso de nulidad al incluir competencias respectivas del Poder Público Nacional (como establecer convenios internacionales o dictar su propia administración del territorio) , además de impulsar un Movimiento Secesionista denominada Rumbo Propio, que fue denunciado por este servidor y otros actores políticos, entre ellos el propio Presidente Hugo Chávez.
No puede dejar de considerarse, que en su gestión como Gobernador el Zulia fue de los primero en secuestros, homicidios, sicariato y esto es parte de un plan, que tiene como objeto la separación del Zulia del resto de Venezuela. Eso es un viejo proyecto del siglo XIX, esbozado inicialmente por José Domingo Rus, Diputado de la provincia de Maracaibo ante las Cortes de Cádiz en 1812 y que después sería retomado por Venancio Pulgar y Jorge Sutherland en el siglo XIX y que en el siglo XXI fue planteado por Rosales, siendo Gobernador de la entidad.
El Zulia tiene la particularidad de ser la parte de la frontera con Colombia que registra la mayor movilidad transfronteriza, llegando a generar una actividad financiera que llegó a alcanzar – en los años iniciales del siglo XXI- hasta 7000 millones US$, esa movilidad implica elementos ilegales como paramilitares, narcotráfico, tráfico de armas entre otras. Eso se incrementa dado los propios intereses geopolíticos de Colombia, relacionado en una doble vertiente. La primera, los obstáculos geográficos que tiene la producción agrícola de ese país (incluyendo los cultivos ilegales de hoja de coca) para colocarse en los puertos de exportación ubicados en el occidente colombiano, Las zonas de producción agrícola, con alta potencialidad y productividad, están todos en departamentos ubicados al sur oriente de Colombia (Putumayo, Guainia, entre otros) y desplazar su producción hasta los puertos del caribe o el Pacífico Colombiano, les lleva un recorrido por tierra que puede ser de hasta 23 horas. En contraste, colocar su producción en los puertos del Sur del lago de Maracaibo, solo les lleva 8 horas. Por eso la élite colombiana, le ha interesado el occidente venezolano desde siempre.
La segunda, es que en la condición de Socio Global de la OTAN, Colombia responde a los intereses geopolíticos de los EEUU en la región, desde los tiempos del Gobierno de Álvaro Uribe, ese país ha sido una punta de lanza en las estrategias de Guerra Proxy contra el Gobierno de Hugo Chávez y luego contra el Presidente Nicolás Maduro. Colombia es parte de una jugada destinada a impulsar una secesión del Occidente venezolano y uno de sus objetivos claves en el Zulia. En este aspecto, el Gobierno del ahora ex Gobernador, Omar Prieto, desarrollo una acción que convirtió al Zulia en uno de los estados más seguros y controló, los esfuerzos secesionistas que habían caracterizado el proceso político reciente en nuestra entidad.
El triunfo de Rosales, reactiva esta amenaza en lo inmediato y de esto, ya hemos advertido en la Comisión de Seguridad y Defensa de la Asamblea Nacional, de la cual somos parte. En estos momentos, el recién juramentado Gobernador del Zulia, ha venido actuando para buscar reactivar sectores claves de la actividad económica del estado, como es el sector petrolero. Así lo anunció en reunión efectuada con la Cámara Petrolera de Venezuela, capítulo Zulia. Lo paradójico del caso, es que el propio actor político ha sido uno de los que hizo llamados al Bloqueo Económico contra la principal industria del país: la petrolera y además. Ha tildado al Gobierno de Nicolás Maduro de ilegítimo.
En contraste, la postura de Omar Prieto siempre giró en la defensa de la integridad del Zulia y su armoniosa articulación con el país nacional. En momentos tan álgidos como el vívido en 2019, cuando desde la Asamblea Nacional se pretendió instaurar un gobierno paralelo, desde este estado se procuró una defensa de la integridad nacional, ante las inocultables amenazas provenientes desde Colombia, que fue empleada reiteradamente como base para lanzar operaciones encubiertas contra Venezuela.
La amenaza Rosales está ahí. La atención que debe prestar el Poder Nacional es urgente. Lo advertimos y lo seguiremos diciendo, porque las posibilidades que el Zulia sea transformado en una “cabeza de playa” en los próximos escenarios políticos es muy cierta. En lo particular, advertimos sobre los peligros de una financiamiento externo, dado la proximidad con Colombia y sus grupos de parapolítica, que tiene el actual Gobernador Manuel Rosales, quién por la naturaleza de su campaña deberá mostrar resultados y eso, como lo hemos señalado en medio de condiciones de asfixia económica, solo le deja una vía: recibir recursos no formales, de fuentes de financiamiento ilegítimas que tengan origen comprometido (drogas, extorsión, asesinatos o de origen externo, a través de USAID u otras Fundaciones trasnacionales) y que le permitan “mostrar” una gestión exitosa en la atención de los servicios públicos y lo convierta en un candidato presidenciable, tal cual lo hizo ya en 2006, contra Chávez.
Por último, me permito llamar la atención a la estructura dirigencial del PSUV en Caracas, sobre estas amenazas que acá señalo y que requieren una acción política urgente. El PSUV en el Zulia tiene una importante base. En estos momentos, más que señalamientos, es necesario retomar la coherencia interna y ello conlleva un esfuerzo de todos los que militamos en este proyecto bolivariano. Debemos eso sí, revisar en detalle el funcionamiento de la estructura electoral, pues no queda duda, que no respondió como debía. Luego presentaremos un análisis detallado del ese comportamiento, municipio por municipio del corredor electoral del Zulia.
Finalizó, con palabras de Argimiro Gabaldón “el camino es largo y duro, pero es el camino”.
Maracaibo 9/12/2021
Historiadorhttp://www.blogger.com/profile/06283244937285398987noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6371381920980036117.post-76265447667574654782017-01-30T07:28:00.000-08:002017-01-30T07:28:23.934-08:00ALFREDO MANEIRO: TEÓRICO Y MILITANTE REVOLUCIONARIO<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://3.bp.blogspot.com/-SILjhetsmpY/WI9bipi8ZlI/AAAAAAAAF1o/1HcfU7z3BUw2u0YAyA1s2UArFNJ46gvmwCLcB/s1600/alfredo_maneiro.png" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" src="https://3.bp.blogspot.com/-SILjhetsmpY/WI9bipi8ZlI/AAAAAAAAF1o/1HcfU7z3BUw2u0YAyA1s2UArFNJ46gvmwCLcB/s400/alfredo_maneiro.png" width="362" height="400" /></a></div>
La construcción de una alternativa a las formas de control económico e institucional del capitalismo, reflejada en la preponderancia del denominado modelo de democracia liberal, no es un proceso fácil. Desde Marx, pasando por Rosa Luxemburgo, el propio León Trosky, hasta V. I. Lenín, Joseph Stalin y Antonio Gramsci, la preocupación en torno al partido revolucionario, ha sido una constante.
En Venezuela, ese debate agrega nombres como Gustavo y Eduardo Machado, Salvador de La Plaza, la famosa discusión entre estos y Rómulo Betancourt, a raíz de la formulación del Plan de Barranquilla, son sólo algunos ejemplos propios de esta deliberación. Más recientemente, sobre todo a partir de la derrota de la insurgencia guerrillera de la década de los años 60 del pasado siglo XX, se generó un debate que tuvo dos matrices, que fueron el resultado de la escisión del Partido Comunista Venezolano (PCV). Me refiero a las posturas del Movimiento al Socialismo (MAS) y de la Causa radical (CausaR). Nos interesa, abrir un debate-homenaje al fundador e ideólogo de este último movimiento: Alfredo Maneiro, que cumpliría 80 años este 30 de enero.
Maneiro fue una figura interesante, surgida en el movido contexto de la resistencia a la dictadura de Pérez Jiménez. En ese momento, tan coyuntural jugó un papel importante en las estructuras estudiantiles incorporadas en apoyo a la Junta Patriótica (JP), establecida como una iniciativa conjunta del Partido Comunista de Venezuela (PCV) y el partido Unión Repúblicana Democrática (URD), a través de las figuras de Guillermo García Ponce y Fabricio Ojeda respectivamente. Su incorporación a los movimientos insurgentes guerrilleros, fue sólo una continuación de la actividad política iniciada con la resistencia a Pérez Jiménez. Cuando la guerrilla, es pacificada con el Gobierno de Rafael Caldera (1968-1972) – con la excepción de Douglas Bravo y otros sectores que siguieron en combate activo- Maneiro funda el partido Causa Radical (Causa R).
Las ideas y consideraciones elaboradas por este pensador y militante activo, son dignas de ser rescatadas en el debate difícil que se encuentra el Partido Socialista de Venezuela (PSUV). Es sin duda, un homenaje a uno de los hombres más lúcidos, en términos de compromiso político y capacidad organizativa.
Maneiro tiene la especificidad de plantear el análisis del partido, en su historicidad concreta. Asume al partido como una unidad orgánica con el todo social. Por ello, al referirnos a su idea de partido, hay que definirlo como un partido-movimiento. Su concepción abrió un espacio a la denominada sociedad civil, más allá del planteamiento de partido de “elegidos”, característico del enfoque marxista-leninista. La idea de establecer una relación directa con la gente, sin intermediación de la nomenklatura del partido, contrasta significativamente con la estructura de “cuadros” y jerárquica que caracteriza a todos los partidos modernos en Venezuela, sin excepciones.
Para este pensador revolucionario no era suficiente la toma del Gobierno, y advertía que si bien su idea de calidad revolucionaria estaba asociada “a un esfuerzo dirigido a la transformación de la sociedad, a la creación de un nuevo sistema de valores humanos” este debía plantearse desde antes de la toma del poder, pero cuya ejecución era el norte de la acción de ejercicio del poder. En este punto, hay que establecer una analogía con los esfuerzos teóricos, planteados por el propio Chávez en torno al documento el Libro Azul (1991 y reeditado recientemente por el Gobierno de Nicolás Maduro). En ese texto, sugería – sin duda influenciado por las lecturas de Maneiro- una posición similar. Chávez afirmaba sobre que (es)… “el pueblo como depositario concreto de la soberanía (el que) debe mantener su fuerza potencial lista para ser empleada en cualquier momento y en cualquier segmento del tejido político” (Libro Azul, 2013: 77).
Es central esta idea. Maneiro asume el partido, no como un simple instrumento de poder, sino como un fenómeno político en una relación tensa con la estructura del Estado Liberal dominante, al cual está fijado en su alteración. Sin embargo, advierte que al estar ese objetivo surcado por la toma del poder, se corre el riesgo del “secuestro” de la estructura del partido y el establecimiento de sub-clases (nuevas clases?) que intenten tomar para sí misma, las conquistas alcanzadas; dice Maneiro: “En realidad, abundan modelos organizativos, qué no importa sus reclamos ideológicos, devienen modelos en escala reducida del mismo “sistema” a cuya destrucción dicen aspirar. En realidad, existen organizaciones revolucionarias que parecen sólo preparadas para adueñarse del aparato del Estado existente, para ponerlo “en marcha para sus propios fines” (Notas sobre organización política, 1971: pag 83)
Sin duda, parece una preocupación muy vigente. Se debe recordar al propio Chávez, en su intervención Golpe de Timón: “estamos tocando puntos clave de este proyecto, que si no lo entendemos bien y lo asumimos bien, pudiéramos estar haciendo cosas buenas, pero no exactamente lo necesario para ir dejando atrás de manera progresiva y firme el modelo de explotación capitalista…” (2015, p.3). La reflexión de ambos actores políticos es esencial para avanzar en un proceso de superación de las condiciones culturales y económicas, que permiten el mantenimiento de las lógicas del capital. Hemos señalado con anterioridad (http://globovision.com/article/chavez-maduro-y-la-gubernamentalidad-liberal-en-venezuela ) que el problema de una alternativa al capitalismo, recorre el camino de superar lo que Michel Foucault denominó la gubernamentalidad liberal, que es el régimen del poder, introducido en el siglo XVIII, que tiene por blanco la población, mediante el control de la economía política a través de los denominados “dispositivos de seguridad”. La gubernamentalidad sería una tecnología del poder, a través del cual se facilita el control sobre la población, utilizando técnicas de gobierno que permiten la aceptación de este.
El objetivo histórico de un partido revolucionario (y en eso coinciden Gramsci, Maneiro y Chávez) no puede ser sólo alcanzar la toma del poder, sino que desde esa acción política avanzar inclementemente en el desmontaje de la estructura de ese Estado liberal, que domina, moldea y asimila todo espíritu de transformación. Pensaba el fundador de la Causa Radical – tan pérdida en términos históricos en la actualidad- que sí bien la toma del poder era un objetivo de alto alcance, no era suficiente y que para poder avanzar, era necesaria una vanguardia revolucionaria, crítica, lúcida, agregaríamos con cualidad ética – que está extraviada en estos momentos- que indique la praxis y se nutra de las experiencias colectivas.
Un verdadero partido-movimiento. Insistimos, el peligro del poder, es que envilece a quién no tiene cualidad ética y por eso señalaba Alfredo Maneiro: ¿por qué en fin, un activista político está condenado, para que su acción tenga significado, a terminar militando en estructuras que íntimamente rechaza, con estilos, mentalidades y prácticas que no concitan su entusiasmó?... En este sentido, la tarea de construcción de una vanguardia, genéticamente ligada al movimiento de masas, que se quiere surgida de su práctica y de su experiencia es, también una tarea de construcción ideológica” (Notas sobre la organización política, 1971: p. 64-66).
Sus reflexiones sobre los peligros asumidos por los partidos modernos, de caer en el aislacionismo con las masas, en la reproducción de parcelas de poder, en el silencio cómplice, parecen pensadas en el entorno crítico del funcionamiento actual del PSUV. Las tensiones entre quienes militan activamente, luchan estoicamente contra los efectos del debilitamiento ideológico, y se oponen al pragmatismo característico de una parte de la nomenklatura del PSUV, están reflejadas en algunas de sus consideraciones, vigentes al máximo en estos momentos: “…Y en la propia fundación (del partido) damos todo tan acabado y resuelto que, al movimiento de masas, y a la militancia de filas , en un alarde de participación a la moda… le garantizamos que podrá influir en la elaboración de nuestra política (de la estructura del partido) , pero cuidándonos de que no pueda participar…un mecanismo de esta clase creemos que conduce fatalmente a la recomposición de las roscas internas, al fortalecimiento del espíritu y de la práctica de círculos innominados y vergonzantes” (Notas sobre la organización política, 1971: p.64)
En esta etapa del proyecto bolivariano, en que nos encontramos en el borde de un “punto de quiebre” del sentido revolucionario de la utopía política surgida en el marco del 4F/1992, eso que el Vice-Presidente de Bolivia denomina “empate catastrófico”, debe ser propicia la ocasión para rescatar el alcance de su pensamiento político y abrir un debate sobre el funcionamiento ético de la estructura dirigencial del PSUV, de los cuadros con responsabilidad en las instituciones del Estado, el papel que han jugado en la pérdida de la condición de vanguardia y en los riesgos que eso supone, para los logros alcanzados desde la aprobación de la constitución de 1999.
No puede perderse la capacidad democrática alcanzada con tanto esfuerzo. Concluimos con otra cita de Alfredo: “… no se trata estrictamente de darle un contenido social a la forma democrática, sino de una reformulación de la forma democrática misma… No veo por qué un revolucionario no puede ser en la teoría y en la política el más demócrata de los ciudadanos, el más interesado en la profundización y en la ampliación de las condiciones formales democráticas” (Escrito con la Izquierda, 1977: 207-209).
El debate sobre nuestro hacer es más necesario que nunca. Los riesgos de ser absorbidos por la gubernamentalidad liberal, la “seducción” del poder económico, es una amenaza latente a este proyecto emancipador. Hay muchos militantes comprometidos, en una lucha sin cuartel contra aquellos, que escudados en las relaciones de poder, en los “amiguismo”, hacen moralmente criticable el esfuerzo constructor y liberador encabezado en su momento por Hugo Chávez y que seguro, serán los primeros ante un escenario de colapso, de asumir posiciones tránsfugas sin ningún remordimiento. Actuemos antes que sea tarde¡¡.
Dr. Juan Eduardo Romero
Historiador/politólogo
Director Centro de Investigaciones y Estudios Políticos Estratégicos (CIEPES)
Juane1208@gmail.com
30/01/2017
Historiadorhttp://www.blogger.com/profile/06283244937285398987noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-6371381920980036117.post-6188825088667712112017-01-30T04:08:00.000-08:002017-01-30T04:08:04.998-08:00UNA EXPLICACIÓN GEOPOLÍTICA PARA COMPRENDER LAS AGRESIONES DE COLOMBIA CONTRA VENEZUELA<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://2.bp.blogspot.com/-yPL2xyiJqwk/WI8skrwX0nI/AAAAAAAAF1U/XAPhKs5svPwcudjvxoLZyx-Ht58XP2LBgCLcB/s1600/colombia512x28.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" src="https://2.bp.blogspot.com/-yPL2xyiJqwk/WI8skrwX0nI/AAAAAAAAF1U/XAPhKs5svPwcudjvxoLZyx-Ht58XP2LBgCLcB/s400/colombia512x28.jpg" width="400" height="386" /></a></div>
En las últimas semanas, desde el Gobierno de Colombia, se han desatado un conjunto de declaraciones – y acciones- que afectan los intereses económicos y geoestratégicos de la República Bolivariana. Comenzando por la decisión del Presidente Juan Manuel Santos de impedir el libre tránsito de vehículos hacia Venezuela, a efecto de surtirse de la gasolina, que a precios internacionales se comenzó a vender, alegando que “no conviene esa modalidad de permitir que los autos y camiones se vayan al lado venezolano a abastecerse de gasolina y se pague con pesos. Eso distorsiona una situación que ya ha estado en vía de arreglo” (http://notitotal.com/2017/01/12/santos-afirmo-no-conviene-permitir-paso-vehiculos-venezuela/ ).
La medida, había sido sugerida como una acción destinada a detener el flujo ilegal de gasolina hacia el territorio colombiano, y que según algunos especialistas – David Paravisini dixit- ha llegado a 45.000 barriles de petróleo diario. Ante esto, la instalación de puntos de venta de gasolina en pesos en la frontera, ha pretendido recuperar parte de esa fuga de capitales, que según el mencionado especialista, le llegó a costar al país la cantidad de 685.933.706,25 BsF diarios. Representantes del Gobierno de Táchira han mencionado que la venta en pesos pudiera significar recolectar entre 120.000 a 150.000 US$ diarios (http://noticiasvenezuela.info/2017/01/venezuela-dejo-de-percibir-375-millones-por-inactividad-de-gasolineras/ ), a través de las casas de cambios también decretadas por el Gobierno de Nicolás Maduro. La decisión del Gobierno de Juan Manuel Santos, ha costado hasta la fecha un promedio de 3,75 millones US$.
El otro hecho, que muestra posiciones agresivas – o por lo menos, no amistosas- hacia Venezuela, es la reciente declaración del Vice- Presidente de Colombia, Dr. Germán Vargas Lleras, quién refriéndose a una política de entrega de viviendas gratuitas a ciudadanos de su país, indicó que esas viviendas “no son para los venecos” (http://www.bbc.com/mundo/noticias-america-latina-38777584 ). La declaración generó una reacción inmediata de la Cancillería venezolana, en respuesta al uso peyorativo al referirse a los venezolanos en Colombia.
La Geopolítica, es la Geopolítica
Estos dos sucesos, han causado mucha polémica en los medios venezolanos y colombianos, pero en nuestro criterio, se pierde de vista las verdaderas causas que explican el accionar de Colombia, en esta – y en otras coyunturas políticas- hacia Venezuela. Todo está relacionado con la Geopolítica y el uso – y aplicación- del concepto de “espacio vital”, establecido por el teórico alemán Friedrick Ratzel (1844-1904), que señala una relación entre espacio y población, a través de la cual el Estado – como organismo vivo- garantizaba su supervivencia, mediante el control sobre esas dos variables. Otro teórico Karl Haushofer (1869-1946), complementa diciendo que toda política exterior de un Estado Nacional fuerte, implica la ampliación de su “espacio vital”, a costa de otras sociedades menos capaces y fuertes militarmente.
¿Las declaraciones del Vice-Presidente de Colombia y las decisiones del Presidente Santos, son decisiones Geopolíticas? Sí, pues ambas están relacionadas con las propias necesidades del Estado colombiano y las apetencias territoriales – y de recursos- que han expresado desde tiempos coloniales. Veamos en detalle, este recorrido histórico.
Desde el proceso de penetración y conquista del actual territorio colombiano, desde 1502 cuando Juan de La Cosa organizó una expedición a la actual Guajira colombiana, pasando por el establecimiento hispano de 1510 en el Golfo de Urabá, así como el asentamiento en la actual Cartagena de Indias, el impulso conquistador buscó la manera de conectarse con las rutas marítimas que conducen al actual Mar Caribe y permitirían una fácil navegación hasta los puertos españoles en Cádiz y Huelva. En 1543, el corregimiento de Tunja plantea la necesidad de buscar una salida hacia el sur del Lago de Maracaibo, pues resultaba menos complicado de utilizar que la vía del río Magdalena. La imposibilidad de sacar, vía terrestre o marítima la producción agrícola por el occidente de la actual Colombia, hizo cada vez más necesario la búsqueda de otro acceso de salida. Ese acceso, siempre ha sido el Lago de Maracaibo, en nuestra actual Venezuela.
Por eso, desde los territorios de la actual Colombia, se autorizó un conjunto de exploraciones de capitanes españoles, que generaron el establecimiento de comunidades – utilizando la encomienda para disponer de mano de obra indígena- hacia el Sur del Lago de Maracaibo. Se establece Mérida en 1558, la Villa de San Cristóbal en 1561, en 1576 Espíritu Santo de La Grita, en 1592 el puerto de Gibraltar, para facilitar la conexión fluvial hacia el Mar Caribe. Resulta indudable la conexión comercial – y la importancia estratégica- para los productores agrícolas en tierras Neogranadinas, de esa ruta desde el oriente de la actual Colombia, hacia el occidente de nuestra Venezuela.
Toda esta actividad, termina beneficiando a la ciudad-puerto de Maracaibo, cuyo asentamiento hispano se termina de consolidar en 1574, haciendo de esta localidad un punto nodal de entrada y salida de mercaderías, enriqueciendo a sus élites y determinando que en 1676, se agregará a Maracaibo a la provincia de Mérida y La Grita. Es tanta la importancia de esta ruta y las facilidades que provee para el tráfico comercial del oriente de Colombia, que cuando se crea el Virreinato de la Nueva Granada en 1717, se le asigna los territorios de las provincias de Santa Fe, Cartagena y Santa Marta (actual Colombia) y de Maracaibo, Caracas y Guayana (actual Venezuela). Mientras la provincia de Maracaibo, estuvo bajo la autoridad del Virreinato de Nueva Granada, la actividad comercial incentivo la consolidación económica tanto de los pueblos y campos del oriente colombiano, como del puerto- ciudad. En términos geopolíticos y conceptuales, Maracaibo y el occidente de Venezuela, eran esenciales en términos de espacio vital para el Virreinato de Nueva Granada. El problema comienza, cuando en 1777, se crea una entidad política diferente: La Capitanía General de Venezuela.
Desde ese momento, la Provincia de Maracaibo se restituye al territorio de Venezuela (al cual había pertenecido con anterioridad), causando una grave complicación – en términos económicos- al oriente de la actual Colombia, pues la salida natural del Lago de Maracaibo, para poder ser usada, debió pagar impuestos muy altos y diversos desde ese momento (almojarifazgo, alcabala, entre otros). Las complicaciones son tales, que las autoridades de Nueva Granada “suplican” el reintegró de la Provincia de Maracaibo a la Nueva Granada en 1780.
El propio Bolívar, entendió el significado geopolítico de la proximidad geográfica del oriente de la Nueva Granada y el Occidente de la Capitanía General de Venezuela y propuso en la Carta de Jamaica (1815) una unidad geopolítica en los siguientes términos: “La Nueva Granada se unirá con Venezuela, sí llegan a convenirse en formar una república central, cuya capital sea Maracaibo, o una nueva ciudad que, con el nombre de Las Casas, en honor de este héroe de la filantropía, se funde entre los confines de ambos países, en el soberbio puerto de Bahía-Honda” . El planteamiento del Libertador, hablaba de una “unidad conveniente”, no de las apetencias en términos del alemán Haushofer, de control de “espacio vital”, a costa del otro.
EL ESPACIO VITAL DEL LAGO: OBJETIVO DE COLOMBIA
Lo que decimos, es que la proximidad geográfica del puerto de Maracaibo, con las regiones del oriente colombiano, son la base que nos permite entender el “flujo” comercial – legal e ilegal- existente hasta la actualidad. Asimismo, el hecho que el puerto de Maracaibo esté geográficamente más cerca de Santa Fé de Bogotá, que de Caracas, nos explica la histórica confrontación de la elite maracaibera con la elite caraqueña, estructurada en torno a los puertos de Caraballeda y La Guaira.
Los grupos propietarios, tradicionalmente ligados al ejercicio del poder, primero en el Virreinato de Nueva Granada, después en la época post-independentista (siglo XIX), así como durante todo el siglo XX y lo que va del XXI, han visto el occidente de nuestra actual Venezuela, como un “espacio vital”, que les pertenece por “derecho”, ignorando eso sí, los alegatos que en términos del uti possidetis iuris tenemos. ´
Han sido mucho los intentos secesionistas en tono al occidente venezolano – la llamada media luna- y sobre el tema, ha advertido tanto el Presidente Hugo Chávez (http://www.guia.com.ve/noti/22391/tesis-de-la-media-luna-solo-seria-factible-en-tres-estados ), así como el actual Presidente Nicolás Maduro. Sobre el tema, hemos reflexionado en otras oportunidades (http://www.aporrea.org/regionales/a187704.html ), así mismo otros historiadores, como Luís Prieto, han advertido lo mismo, indicando los esfuerzos por convertir a Maracaibo – y su espacio geográfico- en un nuevo anexo comercial de los intereses de las elites colombianas (http://www.aporrea.org/regionales/a120802.html ).
El problema de la guerra económica, que permite una fuga de mercancías, dinero y gasolina, entre otros, hacia Colombia desde el occidente de Venezuela (Zulia, Tachirá, Apure, Amazonas), no puede estudiarse en su justa dimensión, sin la comprensión de los intereses geopolíticos que están presente en las acciones de la élite colombiana y que se conectan asimismo, con los intereses geopolíticos de los EEUU. Es una perfecta articulación. Para EEUU y Colombia, las tesis nacionalistas esgrimidas por el proceso bolivariano son una amenaza a sus propios intereses.
Para los EEUU, Venezuela es un incómodo país, en sus planes de consolidación del denominado Proyecto para el Nuevo Siglo Americano (PNSA), que pretende hegemonizar el control del sistema-mundo (economía, recursos naturales, rutas de transporte, flujos de capitales, industria). Para Colombia, las posiciones de defensa de los derechos territoriales establecidos constitucionalmente en 1999, en los artículos 10, 11, 12, 13 y 14, son un obstáculo a los intereses expansionistas, reflejado en los textos escolares y en tesis de funcionarios de alto nivel, como el ex canciller Julio Londoño y su Nueva Geopolítica de Colombia (https://es.scribd.com/document/85564815/Nueva-Geopolitica-de-Colombia-Gen-Julio-Londono ), que han sostenido – y sostienen- la importancia de “recuperar” los viejos territorios de la Nueva Granada.
¿Por qué la alianza EEUU- Colombia contra Venezuela?
La coincidencia geopolítica de EEUU y Colombia, en detrimento de los intereses y la soberanía de Venezuela, tienen un elemento común: el petróleo. Las capacidades productoras de Colombia y EEUU, se han visto seriamente mermadas, afectando en términos de “seguridad energética” su capacidad estratégica. Colombia, ha mantenido una producción constante de petróleo (985.727 BDP según datos tomados http://www.anh.gov.co/Operaciones-Regalias-y-Participaciones/Sistema-Integrado-de-Operaciones/Paginas/Estadisticas-de-Produccion.aspx ) pero ha incrementado el consumo de gasolina y otros derivados en forma importante.
Según David Paravisini, esa diferencia entre lo que produce Colombia y lo que consume, lo equilibra a través del contrabando de extracción que genera, en cálculos del experto unos 9.000 millones US$ a las mafias ligadas al paramilitarismo.
Para esas mafias, es imperativo contar con moneda nacional (bolívares fuertes) para poder pagar la gasolina que sale ilegalmente de Venezuela. Esos bolívares, son convertidos – a tasas de cambio muy favorables para Colombia- en pesos, permitiendo que con ese diferencial, adquirir una variedad de productos en territorio venezolano que luego será vendido, con ganancias enormes pero generando carencias y conflicto en Venezuela. Sobre el tema de los mecanismos de convertibilidad monetaria, son interesantes los trabajos de Luís Gavazut (http://www.15yultimo.com/2017/01/08/el-peliagudo-tema-de-la-venta-de-gasolina-en-pesos/ ).
Ante esta agresión, no velada, desde Colombia, y que según nuestro criterio, forma parte de una acción conjunta en términos geopolíticos, que procuran desestabilizar el sistema institucional venezolano, el Gobierno de Nicolás Maduro, en base a sugerencias surgidas de representantes de los Gobiernos Regionales de algunas entidades fronterizas con Colombia (Zulia y Táchira), ha implementado – emulando a Colombia- casas de cambio, que pretenden recibir pesos colombianos para “legalizar” la compra de gasolina y mercaderías en los 2.219 km2 de fronteras. Compartimos los análisis de quienes sugieren que esta estrategia, no soluciona sino que contribuye con el debilitamiento de nuestra economía, de su signo monetario y de nuestras reservas de divisas (http://www.15yultimo.com/2017/01/26/casas-de-cambio-en-la-frontera-revision-critica-pronosticos-y-recomendaciones/ ).
Para EEUU, las reservas de petróleo de las que dispone nuestro país, son un objetivo apetecible, pues tanto desde el Departamento de Estado, como desde los voceros autorizados, se ha expresado que el gran país del norte, debe procurarse con el control de los recursos naturales necesarios a sus intereses. Es famoso el denominado Informe Cheney (por el Vice-Presidente de EEUU durante la gestión de George W. Bush, Dick Cheney, representante connotado de grandes petroleras), publicado en el año 2001, donde se advertía sobre el posible decaimiento de la producción de hidrocarburos de más de 8.5 millones b/d en 2002 a menos de 7.0 millones B/d para el 2020, mientras que el consumo pasará de 18.5 millones B/d a 25.5 millones en la misma fecha.
Ese informe, estableció que Venezuela era vital, por su disposición de petróleo, pero al mismo tiempo era un obstáculo dada las reformas introducidas en la Constitución de 1999, que le otorgaban amplios derechos y controles sobre la actividad extractiva y la refinación o comercialización ( http://www.jornada.unam.mx/2004/01/26/per-estrate.html ). Con ese informe, se transformó a Venezuela en una “amenaza” a la seguridad energética de EEUU y no es fortuito, que sea con esa misma designación que se emitió el denominado “Decreto Obama” contra el país, en el año 2015.
OBJETIVO: LAS RESERVAS DE PETRÓLEO DE VENEZUELA
El hecho es que las reservas extraíbles de las que dispone la República Bolivariana, son realmente apetecibles. Según un Informe de PDVSA publicado en 2014, en la frontera con Colombia, específicamente en el Golfo de Venezuela, el país dispone de capacidades extraíbles de 540.000 millones de barriles. Opiniones de algunos expertos petroleros, como Fernando Travieso, hablan de reservas extraíbles en la Faja Petrolera Hugo Chávez, ubicada en una extensión de 55.000 km2 alrededor del Orinoco, cercanas al billón 370.000 millones de barriles de petróleo (http://www.eluniversal.com/noticias/economia/afirman-que-crudo-faja-para-varios-siglos_93181 ). En la región fronteriza con la República Cooperativa de Guyana, específicamente en los límites marítimos del Atlántico, la trasnacional Exxon-Mobil señalo a través de su CEO Rex Tillerson (actual Secretario de Estado del Presidente Trump), que en el bloque Stabroek, en su pozo Lisa-1 y 2, hay capacidades extraíbles de 1 billón 400.000 millones de barriles (http://misionverdad.com/la-guerra-en-venezuela/exxon-mobil-acelerar-sus-planes-para-robarse-el-petroleo-venezolano )
Estamos hablando en total, de reservas extraíbles superiores a los 3,3 billones de barriles, muy por encima de las reservas extraíbles totales de los países de la Península Arábica, principales proveedores de los EEUU.
Las potencialidades energéticas de Venezuela, ha llevado a la alianza estratégica entre Colombia y EEUU, en función de la denominada Doctrina de Seguridad Nacional de este último país, consolidando la cooperación militar entre ambos, particularmente desde los inicios del Plan Colombia en 2000, teniendo como consecuencias que más del 71% de los 141.000 millones US$ haya estado destinado al área militar (movilidad aérea, entrenamiento y capacitación, inteligencia, centros de operaciones, http://www.bbc.com/mundo/noticias/2016/02/160201_colombia_plan_colombia_15_aniversario_consecuencias_inesperadas_nc ). Eso se ha traducido en la elevación del contingente armado a más de 420.000 hombres en capacidad de combate, conformado por 280.000 alistados en el Ejército y unos 140.000 efectivos policiales, pero con alto entrenamiento militar.
No hay lugar a dudas, de la perfecta sincronía entre las tesis históricas de la Nueva Geopolítica de Colombia y la denominada Doctrina Obama, que se ha concretado en una creciente presión (diplomática o a través de Operaciones Encubiertas) contra el Gobierno de Venezuela, particularmente recias desde que el Presidente Nicolás Maduro asumió en abril de 2013 al momento de la desaparición física de Hugo Chávez.
Somos testigos del incremento de la actividad militar, que se ve multiplicado por las posibles consecuencias a futuro ante el anuncio del Presidente Juan Manuel Santos del Acuerdo con la OTAN y el papel que jugará Colombia, en la estrategia de asfixia contra el denominado “triángulo insurgente”: Bolivia, Ecuador y Venezuela.
En conclusión, las acciones encubiertas que adelanta EEUU a través del financiamiento por medio de la NED a diversas organizaciones, que normalmente critican al Gobierno venezolano, así como las acciones directas ejercidas por particulares con – o sin apoyo- del Gobierno Colombiano, que afectan la economía, la vida social y la tranquilidad de la población en territorio venezolano; forman parte de una Geopolítica del Miedo, destinado a forzar la eclosión de la Presidencia de Nicolás Maduro y a partir de ahí, reconfigurar las relaciones de poder interno, accediendo a mejores condiciones tanto de acceso comunicacional y territorial, así como de control de los recursos energéticos, tan apetecidos por los denominados Imperialismos Colectivos.
Las estrategias de resistencia y desmontaje de esta agresión, son una tarea no sólo de los organismos de seguridad del estado venezolano, sino también de todos los movimientos sociales y organizaciones políticas, no alineadas con esta agresión trasnacional, que no tiene ningún indicio de disminuir con la nueva administración en EEUU.
Dr. Juan Eduardo Romero J
Director Centro de Investigaciones y Estudios Políticos Estratégicos (CIEPES)
Historiador/politólogo
Juane1208@gmail.com
30/01/2017
Historiadorhttp://www.blogger.com/profile/06283244937285398987noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6371381920980036117.post-84880257953973312472017-01-09T17:33:00.003-08:002017-01-09T17:33:43.505-08:00Brzezinski, Donald Trump, el Sistema-mundo y Venezuela<a href="https://3.bp.blogspot.com/-c0XDjqDqwKc/WHQ56vCq2tI/AAAAAAAAFrM/s67LbQB9NHshJlfZeLViUNALc1HKgfhDQCLcB/s1600/donald-trump.jpg" imageanchor="1" ><img border="0" src="https://3.bp.blogspot.com/-c0XDjqDqwKc/WHQ56vCq2tI/AAAAAAAAFrM/s67LbQB9NHshJlfZeLViUNALc1HKgfhDQCLcB/s320/donald-trump.jpg" width="320" height="182" /></a>
Mucho se habla de los EEUU y su geopolítica, pero también es mucho lo que se ignora de las bases conceptuales y los denominados “tanques pensantes” que nutren las posiciones extremas de los Presidentes del coloso del Norte. Quizás uno de los casos más emblemáticos es el de Zbiegniew Brzezinski, polaco-norteamericano que ha sido connotado asesor de diversos Presidentes de EEUU, desde Jimmy Carter, hasta Barak Obama y todo parece indicar, una notoria influencia en diversos postulados emitidos por el Presidente electo, Donald Trump.
Pero, ¿Cuáles son las tesis geopolíticas sostenidas por este intelectual norteamericano? En primer lugar, ha sostenido desde hace años, la posibilidad de una convergencia entre los EEUU y Rusia, en función de constituirse como hegemones mundiales, o en las tesis de Immanuel Wallerstein, Imperios-mundos. Ese planteamiento, le ha acarreado notorias resistencias entre otros tanques pensantes neoconservadores, pero se basa en considerar que la capacidad tecnológica, militar y sobre todo económica de los EEUU no puede, por sí sola, dominar el mundo en lo que resta del Siglo XXI. El creciente gasto acarreado por la estrategia militar del Unilateralismo Globalizante, llevado adelante por las gestiones de George Bush (padre e hijo), Bill Clinton y Barak Obama, queda demostrado en el hecho que ese rubro representaba un 2,9% del PIB en el 2000 y para el 2010 alcanzó 4,66%, y para el año 2016 representó un 2,8%. La disposición de enormes recursos para mantener el aparato militar y así mantener la supremacía hegemónica, ha generado un debate ante el fracaso de esa meta unilateral. Es ese el principal argumento esgrimido por Brzezinski y reproducido en el discurso presidencial de Trump, durante la campaña electoral.
Para este teórico norteamericano, es necesaria una política de contención no confrontacional con Rusia, con el objeto de evitar a toda costa una asociación entre esté y China, que resultaría en una pérdida total de la hegemonía siempre anhelada por el “destino manifiesto” de EEUU. Las políticas implementadas por el unilateralismo globalizante, desde 1991 hasta 2016, no han hecho sino acercar a las otras grandes potencias, quienes han sumado otros países poderosos, tanto en términos militares (Sudáfrica, India, Pakistán) como económicos (Brasil), pero más preocupante aún, es que en términos geográficos esa asociación ha significado una gran influencia en Eurasia y Asia Suroccidental. En la práctica (la real politik), los EEUU han perdido terreno por su esfuerzo de concretar las tesis de Mackinder sobre el Heartland (Eurasia), cuestión que no han logrado y además, han perdido influencia en lo que han considerado su “patio trasero”: Nuestra América.
No es coincidencia, que el discurso de Trump sobre recuperación de la grandeza de EEUU, confluya con las tesis geopolíticas de Brzezinski, que insisten en la necesaria creación de un consenso con Rusia y la recuperación de la influencia en su área o espacio vital. Todo lo recientemente ocurrido en Eurasia, representado en los esfuerzos de la OTAN (y los EEUU) por desestabilizar el Gobierno de Erdogan en Turquía, el retroceso de ISIS ante la alianza Rusia-Irán-Turquía, el incremento del aislacionismo de Israel y la radicalización de la represión en Palestina, así como el incremento del poderío militar de China en su área de influencia, aunado a los gobiernos no adheridos a las líneas estratégicas del Proyecto para el Nuevo Siglo Americano (PNSA) en Sudamérica, han permitido un debate sobre el decaimiento de los EEUU y el impacto sobre la sociedad occidental. Por eso, la insistencia de Trump en su eslogan de campaña “hagamos América Grande de nuevo”.
En términos de la geopolítica, la división (y debilidad) de Europa, se constituye en un obstáculo para las tesis de dominio concretadas a través de uno de los vehículos creados por el teórico norteamericano, la Trilateral: EEUU, Unión Europea y Japón. Las decisiones que llevaron a Inglaterra al Brexit, terminaron de mostrar la imposibilidad que esa alianza (bajo la cual actuaron los ex presidentes Bush –padre e hijo- así como Clinton y Obama) perdurará en el tiempo y abrieron los ojos, a la posibilidad de un tipo de asociación no confrontacional, bien con Rusia o China. Hay sin dudas resistencias, en los valores que representan el conservadurismo norteamericano y su “tesis del destino manifiesto”, ante la posibilidad de un entendimiento con Vladimir Putin, pero lo cierto es que se trata de evitar a toda costa, que se produzca la asociación firme y concreta de los acuerdos – ya adelantados- de apoyo recíproco entre Rusia y China, tanto en términos monetarios – el impulso del Yen- como en lo que respecta a la asistencia militar.
Eso significa, que posiblemente Trump adelante el acercamiento diplomático, en vez de seguir optando por el cerco militar a través de la OTAN, que ya ha llevado a la incorporación de varias ex repúblicas de la extinta URSS (Georgia por ejemplo)o algunos de los países del denominado “socialismo real”, como Polonia, Hungría, República Checa (parte de la ex Checoslovaquia) y que ha generado, en respuesta, una expansión de la capacidad militar de Rusia, que ha mostrado su nuevo poderío en las acciones implementadas en Siria. Es notorio, el avance lento pero firme de la Rusia de Putin, por recobrar el carácter de potencia que tuvo en algún momento la desaparecida URSS. En ese esfuerzo, se produce una preocupación adicional para los intereses estratégicos de los EEUU, determinado por el acercamiento en términos económicos y militares, que tanto Rusia como China han tenido en Nuestra América.
Los convenios de venta de armas y asesoría militar firmados con Rusia y Venezuela, así como la asociación (y presencia) de capitales chinos en diversas partes del considerado “patio trasero” de EEUU, así como la posibilidad de construcción de un nuevo canal (más amplio) en Nicaragua, derivando en una pérdida de influencia sobre Panamá, han activado las alarmas en los grupos de poder y las súper elites ligadas al tema económico y militar, que gravitan tanto en torno al Pentágono, como en el departamento de Defensa. Esto puede traducirse en diversos escenarios, pero todos definitivamente conflictivos para las denominadas “democracias radicales” (Bolivia, Ecuador, Venezuela y Nicaragua).
Los esfuerzos de Trump, parecen marcados por las tesis del politólogo norteamericano y ello se traducirá en esfuerzos por bajar la intensidad de la actual confrontación con Rusia, buscando con ello establecer una alianza estratégica inter-potencias, que tendría un doble efecto: por un lado, disminuir las amenazas que han surgido ante el fracaso de los EEUU y sus acciones militares en Eurasia; al mismo tiempo, lograr disminuir los apoyos estratégicos y militares de Rusia en Nuestra América, facilitando así las acciones (encubiertas o no) de los diversos organismos de inteligencia de los EEUU, así como el desenvolvimiento de la OTAN.
Es este marco el que debe ser entendido, para interpretar el accionar de los EEUU y los Imperialismos Colectivos en el desequilibrio de la alianza entre Argentina, Brasil y Venezuela, construida en las gestiones de los Presidentes Néstor Kichner, Lula da Silva y Hugo Chávez. La campaña de desprestigio, que en el caso de Argentina y Brasil, terminaron en la derrota de las fuerzas sucesoras de los liderazgos de los Kichner y de Lula, ha permitido un reacomodo geopolítico momentáneo, pero que ha sido eficaz para aumentar la -ya de por sí- grande presión sobre Venezuela. Las acciones que han emprendido los gobiernos de Macri y Temer contra Venezuela en el MERCOSUR, así como los movimientos que han generado para debilitar la UNASUR al mismo tiempo que se acercan a la Alianza del Pacífico, muestran la validez de este análisis.
Si no fuera suficiente, los EEUU y los Imperialismos Colectivos incrementan su acción de cerco militar sobre Sudamérica, a través de los acuerdos ya firmados por el presidente Mauricio Macri que autoriza la instalación de bases militares en Ushuaia y la triple frontera. Con ello, pasarían los EEUU y la OTAN, a controlar una parte de los estratégicos recursos de agua, disponibles tanto en la Antártida como en los acuíferos guaraníes, un elemento de debilidad que está presente en el juego geopolítico, pues sus reservas de agua potable se han reducido con la actividad depredadora del medio ambiente, pero con estas bases, pasarían a ejercer un dominio hegemónico sobre esas zonas. Asimismo, completarían el control geopolítico de esas bases, con la ya de por sí incómoda presencia inglesa en las Islas Malvinas, dominando en términos de presencia todo el acceso en el Atlántico Sur.
No puede obviarse, los anuncios sobre Acuerdos entre Colombia y la OTAN, que terminarían de cerrar el círculo envolvente sobre el espacio vital de Sudamérica, en donde se encuentran las mayores reservas energéticas del mundo, conformadas por los casi 2 billones de barriles extraíbles de Venezuela (750.000 millones en la zona marítima reclamada a Guyana, 515.000 millones de la Faja Hugo Chávez y los 540.000 millones en el Golfo de Venezuela), así como las más importantes fuentes de agua potable (casi 18000 Km3) y la mayor biodiversidad, ubicada en el Amazonas.
Todo ello, para apoyar las acciones encubiertas, planteadas en el Manual de Guerra No Convencional del Departamento de Guerra de los EEUU y el desarrollo de lo que el teórico geopolítico Brzezinski denomina “caos constructivo”, que consiste en la generación de divisiones y fraccionamientos que conduzcan a caos o desórdenes, que permitan alegar la existencia de “Estados Forajidos” o violadores del derecho Internacional, por ser además “Estados Fallidos”, incapaces de satisfacer las necesidades de su población y de esa forma, alegar una posible intervención humanitaria, como ya ha sucedido en Haití.
Este escenario, es especialmente preferido para el caso Venezuela. Las acciones que adelanta la Asamblea Nacional de Venezuela (ANV), tanto con su anterior Presidente – Henry Ramos Allup de Acción Democrática (AD)- como del actual – Julio Borjes de Primero Justicia (PJ)- se encuentran dentro de las hipótesis de “caos constructivo”, que propicié situaciones de alta conflictividad, basadas en una agenda trasgresora, que puede recurrir tanto a acciones de calle como alteraciones violentas del “orden institucional”. La decisión de la ANV de declarar el “abandono de funciones” del Presidente Maduro, inexistente en la Constitución de la república Bolivariana de Venezuela busca es la creación de desorden y alteración, y con ello generar un pronunciamiento de organismos internacionales, que en última instancia pudiera terminar en una acción militar conjunta, a efectos de evitar un desequilibrio en la sub-región, tal como lo han manifestado ya en el papel de trabajo publicado por Robert Ellis, denominado la Implosión en Venezuela y las consecuencias para EEUU (http://www.strategicstudiesinstitute.army.mil/index.cfm/articles/the-approaching-implosion-of-venezuela/2015/07/10 )
Las tesis del teórico norteamericano, asesor de inteligencia de Obama y ahora de Trump, son una verdadera amenaza para la estabilidad de la región y en general del mundo. Esperemos el desenvolvimiento de la próxima presidencia de EEUU y veremos la consecuencias para el sistema-mundo.
Dr. Juan Eduardo Romero/ historiador-politólogo
Director del Centro de Investigaciones y Estudios Políticos estratégicos (CIEPES)
Juane1208@gmail.com
9/01/2017
Historiadorhttp://www.blogger.com/profile/06283244937285398987noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-6371381920980036117.post-50041250428920106272017-01-09T15:01:00.000-08:002017-01-09T15:02:20.490-08:00Con Colombia, Ya Basta...Con Colombia, Ya basta…
Habría que comenzar diciendo que no se trata de una postura xenofóbica. Nada más alejado de la realidad. Se trata eso sí, de señalar las formas en las que el accionar de las élites colombianas, que controlan el aparato del Estado, generan una constante amenaza en contra de los intereses de Venezuela y que amerita, por lo tanto, una respuesta diplomática contundente.
Sostenemos que las acciones de amenaza de Colombia se expresan en tres ámbitos, interconectados. Un ámbito geopolítico, un ámbito económico y el último, referido a la seguridad. El marco geopolítico, es el marco general, derivado del papel que en el sistema-mundo juega Colombia. Para entenderlo, hay que comenzar por comprender el significado del denominado Proyecto para el Nuevo Siglo Americano (proyect for new american century). ¿Qué es el PNSA? Es una iniciativa de un conjunto de tanques pensantes, neoconservadores y neoliberales en los EEUU, entre los que debe resaltarse a Dick Cheney, Jeb Bush, Paúl Wolfowitz, Donald Rumsfeld, Dan Quayle, Lewis “Scooter” Libby, Eliott Abrams, John Bolton, Richard Perle y otros no menos fundamentalistas y oscuros personajes de la extrema derecha estadounidense. Pretenden establecer “un nuevo orden mundial”, que conduzca a : 1-. La apertura, la estabilidad, el control y la globalización mundial de los mercados, así como la seguridad y la libertad del comercio; 2-. El acceso sin restricciones y donde se encuentren a las fuentes energéticas y de materias primas necesarias para dinamizar su economía y la de sus aliados; 3-. El monitoreo y control en tiempo real de las personas y de todos los movimientos políticos y sociales importantes contrarios a sus intereses; 4-. La expansión y consolidación del dominio del capital financiero e industrial de sus empresas y corporaciones trasnacionales y 5-. El aseguramiento del control sobre los medios de comunicación y de información mundial.
En los escenarios dibujados en el PNSA, hay un conjunto de países denominados “Estados Tapones”, que juegan el papel de contención a otras amenazas provenientes de Estados que no se articulan a los intereses de los EEUU y los Imperialismos Colectivos. En ese marco, es que se ubica Colombia. En términos geopolíticos, Colombia se ha convertido en un socio esencial para las estrategias de control hegemónico implementado desde el PNSA y que se enmarcan en el denominado ulilateralismo globalizante, que asume que los EEUU debe “imponerse” sobre sus aliados tradicionales (Inglaterra, Francia y otros) pero también sobre sus enemigos históricos (Rusia y China). En términos geopolíticos, Colombia se ha transformado en un factor de presión sobre la “amenaza” que representa Venezuela y su propuesta de no alineamiento a los intereses de EEUU. Por ello, el paulatino fortalecimiento de las fuerzas armadas colombianas, desde el año 2000 con el Plan Colombia y el incrementó de su capacidad bélica, generando desequilibrios militares en la región.
Las recientes acciones concretadas por el presidente Juan Manuel Santos y que derivan en la posibilidad de inclusión de Colombia en los planes estratégicos de la OTAN, se encuadran en la perspectiva de EEUU de retomar el control hegemónico en Suramérica, tan debilitado desde el No al Área de Libre Comercio para las Américas (ALCA) de Mar del Plata en 2005, a partir de la cual se tejió el denominado triángulo ABV (Argentina, Brasil y Venezuela), con la sintonía práctica en las políticas exteriores de los Presidentes Néstor Kichner, Lula da Silva y Hugo Chávez. Colombia, y particularmente su Presidente, han logrado la “derrota” de las FARC-EP, sin el costo militar y económico que implicó la tesis de la guerra permanente de Uribe. Esa derrota (o desmovilización de las FARC-EP) permite a la estrategia militar conjunta de los EEUU y el ejército colombiano, llevar adelante planes contra Venezuela sin tener la amenaza de dejar en su retaguardia un adversario militar que pueda actuar en una circunstancia de avanzada. Por ello, el accionar de Colombia con los acuerdos con la OTAN se deben entender en una gran jugada geopolítica, que se adelantará a partir de la Presidencia de Donald Trump, que busca retormar el “destino manifiesto” de los EEUU en la región.
En este cuadro general, Colombia – el Estado y los sectores dominantes- se prestan a un conjunto de “acciones encubiertas”, que terminan agrediendo a Venezuela, buscando debilitar las bases de apoyo electoral. Esas “acciones encubiertas”, en realidad no son tales, en cuanto su desarrollo forma parte de una política de Estado, sin embargo, enmascaradas en la defensa de los intereses económicos de los actores colombianos, subyace una velada intervención de los EEUU para desestabilizar la economía venezolana. Es el caso de la pervivencia de la Resolución N 8, que permite la “libre convertibilidad” por parte de las casas de cambios en la franja fronteriza de 2.218 km2 compartida con Venezuela. O la reciente decisión de impedir, por decreto nacional, el libre tránsito vehicular hacia las bombas de expendio de gasolina ubicadas en territorio venezolano y que pasarán a vender gasolina en pesos colombianos.
La negativa de acceder a ello, por parte del Estado, se traduce en la aceptación tácita de un boicot contra Venezuela. La acción implementada por el Presidente Maduro, busca disponer de fuentes de obtención de divisas (pesos colombianos), al mismo tiempo que busca detener el comercio ilegal de extracción de combustibles hacia Colombia. El Estado Colombiano ha protegido los grupos legalizados de paramilitares que controlan la actividad del canje de divisas en la frontera. Venezuela debería sencillamente decretar la finalización del convenio de convertibilidad pesos/bolívares que mantiene con Colombia, como una respuesta contundente a los planes de desestabilización encubierta a los cuales se presta nuestro vecino. La aseveración realizada recientemente por el Presidente de Venezuela, en el sentido que en Colombia – principalmente- se encontraba casi el 70% de los billetes de 100 BsF emitidos por el Banco Central de Venezuela (BCV), es una muestra de la acción desleal del Gobierno de Santos y el papel que juega, contra la democracia bolivariana. Es casi seguro, que ante el reciente anuncio de Venezuela de implementar – en correspondencia con las acciones de Colombia- casas de cambio en la frontera venezolana, observemos también otro decreto de Santos, impidiendo esa actividad o negando permiso para el libre tránsito fronterizo. Se trata de cerrar el cerco sobre el Gobierno de Maduro y crear condiciones para extremar el caos social.
Hay un tercer ámbito, desde el cual decirle Ya Basta a Colombia, es el de seguridad. Cuando se produjo el cierre fronterizo decretado por Venezuela en 2015, una de sus consecuencias fue el establecimiento de reuniones bilaterales entre las fuerzas de seguridad de ambos países. En esos encuentros se acordó acciones conjuntas para disminuir las actividades ilegales en los lindes fronterizos. A pesar de la vigencia de esos acuerdos, las fuerzas de seguridad colombianas no han ejercido control férreo sobre el desenvolvimiento de las mal llamadas Bandas Criminales (BACRIM), un eufemismo creado por los tanques pensantes colombianos para “negar” la realidad: son grupos paramilitares, desmovilizados (y protegidos) por las fuerzas del Estado Colombiano.
La inacción contra las bandas paramilitares, asociadas no solo a las casas de cambio, sino articuladas con las operaciones ilegales de trafico de moneda y productos alimenticios, así como armas, drogas es tal, que se trata de una macro operación que termina generando no solo carencias de productos en Venezuela, sino desestabilizando todo el sistema económico nacional. Todo ello, bajo la mirada cómplice de la policía nacional colombiana y sus fuerzas armadas (así como de elementos dentro de la Guardia Nacional Bolivariana y sectores militares). La acción es unilateral. Hemos sido testigo de detenciones y procesos contra Guardias Nacionales Bolivarianos y efectivos militares del lado venezolano, pero no se ha visto acciones reciprocas en Colombia. ¿Por qué sucede eso? Tiene que ver con el papel que esas acciones – que no son encubiertas- tienen en la desestabilización. Cuando a través de la libre convertibilidad, se permite transformar el sueldo mínimo en Colombia de unos 620.000 pesos a más de 142.000 Bsf, estos son utilizados por las mafias contrabandistas y paramilitares para “pagar” a quienes compran productos regulados en el sistema de mercado interno de Venezuela. Esa misma acción ilegal, obtiene enormes ganancias al “transportar” hacia la frontera esa mercadería, que es vendida a cuatro o cinco veces su valor de compra, pero en pesos colombianos. Estos de nuevo son convertidos a bolívares o dólares y vuelven a la economía, generando especulación, acaparamiento y elevando la conflictividad social, que “termina culpando a Maduro” por todo.
Se trata, en ese enfoque geopolítico del cual hablamos al principio, de producir un “quiebre” de la autoridad, que es uno de los principios axiomáticos de desenvolvimiento, según Gene Shard (De la Transición de la democracia a la Dictadura) y del Manua<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://2.bp.blogspot.com/-N1zbwFsxYiE/WHQWE3KtBaI/AAAAAAAAFq4/hjXi9iZJdSM1ttfZ6tnd6zAmvw1uA-CVgCLcB/s1600/santos-maduro_1.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" src="https://2.bp.blogspot.com/-N1zbwFsxYiE/WHQWE3KtBaI/AAAAAAAAFq4/hjXi9iZJdSM1ttfZ6tnd6zAmvw1uA-CVgCLcB/s320/santos-maduro_1.jpg" width="320" height="209" /></a></div>l de Guerra No convencional del Departamento de Guerra de los EEUU. Ello es la base de actuación interna, de las fuerzas políticas con una agenda transgresora dentro de la MUD, para alegar “abandono del cargo”, por parte del Presidente Maduro. Todo se enmarca en una estrategia de deslegitimación, que insiste en presentar al proyecto bolivariano como un Estado Fracasado, ante el cuál es necesaria una “intervención”, bien humanitaria (a través de organismos como la OEA) o a través de la provocación de una acción militar, tanto en la frontera occidental o en la oriental, dependiendo de las condiciones, como último recurso. Habrá que repetir como en el Arte de la Guerra: Si conoces a los demás y te conoces a ti mismo, ni en cien batallas correrás peligro; si no conoces a los demás, pero te conoces a ti mismo, perderás una batalla y ganarás otra; si no conoces a los demás ni te conoces a ti mismo, correrás peligro en cada batalla.
Dr. Juan Eduardo Romero. Historiador/politólogo
Director del Centro de Investigaciones y Estudios Políticos Estratégicos (CIEPES)
Juane1208@gmail.com
9/01/2017
Historiadorhttp://www.blogger.com/profile/06283244937285398987noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6371381920980036117.post-31388893429628790492017-01-09T14:52:00.000-08:002017-01-09T14:52:10.073-08:00RÓMULO BETANCOURT Y JULIO BORGES: COINCIDENCIAS PELIGROSAS <div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://3.bp.blogspot.com/-lwI-mpF-NpM/WHQT-ZdbzXI/AAAAAAAAFqs/-GgLV9ci0X0ZbE58oz4YEZxrd3apu8ABQCLcB/s1600/Julio-y-Romulin-1-737x415.png" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" src="https://3.bp.blogspot.com/-lwI-mpF-NpM/WHQT-ZdbzXI/AAAAAAAAFqs/-GgLV9ci0X0ZbE58oz4YEZxrd3apu8ABQCLcB/s320/Julio-y-Romulin-1-737x415.png" width="320" height="180" /></a></div>
Cuando escuché el discurso de Julio Borges, juramentándose como Presidente de la Asamblea Nacional para el período 2017-2018, irremediablemente me recordé de Rómulo Betancourt y la coyuntura política de 1945. En ese entonces – como hoy- el país se debatió entre diversos modelos de democracia. Por un lado, estaba Medina Angarita y el Partido Democrático Venezolano (PDV), que sí bien había generado una apertura importante, eliminando el prejuicioso Inciso IV de la Constitución de 1936, no había accedido a la realización de elecciones libres extensibles a todos (as) los venezolanos (as). Es lo que algunos autores han denominado una democracia restringida. En el otro lado del conflicto, se encuentra Acción democrática (AD) y Rómulo Betancourt, que propugnó la idea de una democracia de partidos, con una estructura que mediará la participación a través de esas organizaciones. Finalmente, se encontraba el Partido Comunista de Venezuela (PCV), en cuyos cuadros se discutió la necesidad de una democracia popular. Esos modelos, mantenían una pugnacidad que se mostraba en la Prensa Nacional y en un debate enconado entre sus líderes.
He aquí una primera analogía. Hoy, observamos un debate sobre diversos modelos de democracia. Por una parte, en el seno del PSUV se plantea y vocifera sobre el tema de la democracia popular y participativa, pero desde dentro de su estructura hay tensiones creativas, que pugnan por decisiones cerradas, obviando el parecer – o por lo menos la consulta- de buena parte de las bases, justificado este accionar ante el acoso del cuál ha sido objeto el proyecto bolivariano desde la elección de Nicolás Maduro, en abril de 2013. Del otro lado, en una aparente unidad, se observa en torno a la MUD, dos tendencias diferentes de democracia. Por un lado, los que apuestan a un modelo elitesco-liberal: Primero Justicia (PJ) y Voluntad Popular (VP). En otro aparte de la MUD, hay que ubicar a AD y Un Nuevo Tiempo (UNT), cuya propuesta de democracia es más centrada en la idea betancuriana de centralidad del partido político. Ayer (1945) al igual que hoy, las tensiones del debate interno de la democracia deben ser aliñadas con el contexto geopolítico internacional y el papel (e injerencia) de los EEUU y los Imperialismos Colectivos.
Hay que recordar, que producto del papel que jugó el petróleo venezolano en las ofensivas de la II Gran Guerra (1939-1945), el Gobierno de Isaías Medina Angarita aprovechó para renegociar la relación con las compañías petroleras, que se concretó en la formulación (y aprobación) de la ley de Hidrocarburos de 1943. Esa Ley, introdujo algunos elementos que disgustaron a los representantes de las Compañías Petroleras, sobre todo relacionadas con la alteración de las leoninas condiciones que disfrutaban desde los tiempos de Gómez, en detrimento de los intereses nacionales. La postura firme de Medina Angarita, concretada en la Ley de 1943, le generó desavenencias con el departamento de Estado de Norteamérica, que tendrían sus consecuencias en los sucesos de Octubre de 1945.
He acá la segunda analogía. Las tensiones geopolíticas, derivadas del hecho que los intereses geoestratégicos de los EEUU en el creciente mayor (Asia Central y Península Arábica) se han visto afectados y con ello, la disponibilidad de proveedores seguros de petróleo, sumado a la acción efectiva de Rusia en la zona, atentando contra los esfuerzos de los Imperialismos Colectivos de redibujar el mapa político de la zona, desintegrando Siria, el norte de Irak, entre otras ideas; ha derivado en una nueva mirada hacia su “patio trasero”, momentáneamente descuidado ante las tesis del unilateralismo globalizante de las gestiones de los Bush (padre e hijo), de Clinton y de Obama (1991-2016). Son las tesis de Zbigniew Brzezinski, principal asesor en política exterior desde los tiempos de Jimmy Carter (1977-1981) y fundador de la Comisión Trilateral, base actual del Imperialismo Colectivo (EEUU, Unión Europea y Japón), las que privan en este momento. Es posible entender en un contexto de influencia de este pensador, la “aparente” simpatía de Donald Trump por la Rusia de Putin, quién ha abogado por un “nuevo orden mundial”, que establezca una “gran zona de paz”, asegurada por la articulación de los intereses de las grandes potencias, evitando así que los EEUU siga perdiendo espacio. Es este contexto, el que explica la agresiva campaña del grupo de la súper élite norteamericana (sub-elites política, económica, militar) contra Venezuela.
La tercera analogía, deviene del accionar de Rómulo Betancourt en la coyuntura de 1945, previo al Golpe de estado encabezado por la Unión Patriótica Militar (UPM) y el discurso del actual Presidente de la Asamblea Nacional, Julio Borges, Diputado de Primero Justicia (PJ). El líder de Acción Democrática (AD), estuvo comprometido (y en contacto) con los militares complotados contra Medina Angarita, desde el mes de junio de 1945, tal como lo manifiesta el propio Betancourt en el texto “Rómulo Betancourt: memoria del último destierro (1948-1958)” publicado por Ediciones Centauro (1982). Hay que recordar, que ya se venían dando diálogos entre diversas organizaciones opositoras a Medina Angarita, a efectos de construir una candidatura de consenso. En el caso de Julio Borges, es bueno recordar el papel que tiene el partido PJ en las negociaciones (interrumpidas por ahora) entre la MUD y el Gobierno, con el apoyo del Vaticano.
Pero la analogía va más allá, y es lo que resulta interesante (y preocupante). Tanto Betancourt como Borges hoy, mantuvieron un discurso provocador que enunciaba acciones no institucionales. El flamante Presidente de la Asamblea Nacional, dijo en su intervención para Juramentarse, lo siguiente: "Tenemos el propósito de un cambio radical. Necesitamos construir una Venezuela donde tengamos y seamos más, un país humanizado, donde se respete la dignidad de cada venezolano. Que el pueblo sea el dueño del petróleo, que estimulemos la inversión privada, el reto es desmantelar a este estado corrupto y construir una Venezuela productiva. Que se escuche la voz del pueblo es la primera misión de este Parlamento". Por su parte, Rómulo Betancourt el 17 de octubre de 1945, en un mitin en el Nuevo Circo de Caracas decía lo siguiente: «Somos un partido político que se ha organizado para que este pueblo aquí congregado, para que el pueblo venezolano vaya al poder y nosotros con ese pueblo a gobernar [...] para implantar un programa de salvación nacional». Coincidencia asombrosa? No parece. Ambos actores, en mi hipótesis (comprobada en el caso del líder de AD, por comprobar en el caso de Borges), estaban en plena agenda trasgresora, destinada a producir un cambio institucional en el sistema político venezolano.
Cualquiera que lea, someramente pudiera alegar alarmismo, exageración de este historiador militante. Sin renunciar a mi militancia, pero en respuesta a esa duda razonable, respondería citando a ambos líderes políticos y a la preocupante (de nuevo) analogía entre sus estructuras discursivas. Veamos, Betancourt, cerraría el discurso del Nuevo Circo, con estas palabras que anunciaban la radicalidad que se concretaría al día siguiente: «A todo el pueblo venezolano, a todas las clases sociales venezolanas, a todos los que se sienten desvinculados de este régimen los llamamos a luchar por la consigna que en esta noche histórica de la nueva Venezuela dejamos sembrada en la conciencia del país: elecciones generales, presididas por un gobierno provisional, a fin de que mediante el sistema de sufragio directo, universal y secreto el pueblo venezolano pueda escoger a un Presidente de República y a un poder legislativo que sean los auténticos depositarios de la soberanía de la Nación».
Por su parte, Julio Borges, señaló lo siguiente: "Nicolás Maduro al abandonar la Constitución, abandonó el cargo. Con esta decisión la Asamblea abre las puertas para que en Venezuela haya elecciones en todos los niveles, desde gobernadores, alcaldes, presidente de la república y ¿por qué no? , reelegir una nueva Asamblea Nacional, esa es la consigna, que el pueblo decida…Este rescate de la constitución pasa por el rol que jueguen los miembros de la Fanb a quienes debemos enviar un mensaje, recuerden su juramento, porque hoy Dios y la patria se lo demandan, que sean los guardianes y garantes de la Constitución, hermanos de la Fanb Maduro está fuera de la Constitución y eso es inaceptable. Permanecer en una actitud complaciente frente a la tiranía es negar su razón de ser. Es obligatoria la construcción de una nueva relación entre el pueblo y su Fuerza Armada Nacional. El país espera mucho de ustedes y en las puertas de la conciencia de ustedes está el pueblo venezolano que clama ser escuchado".
Como se ve, ambos hacían llamados a elecciones, de forma tal que ese proceso dé al traste con las gestiones políticas de los gobernantes de turno (Medina Angarita en el caso de Betancourt, Nicolás Maduro en el caso de Borges).¿ Estamos ante una preocupación infundada?. La respuesta la obtendremos en el transcurso de este proceso, que avizora un 2017 lleno de conflictos, que esperemos no terminen, como ocurrió después del 18 de octubre de 1945, sumiendo al país en un proceso cruento y duro, por las posiciones extremas y los intereses partidistas individuales.
Dr. Juan Eduardo Romero
Historiador/politólogo
Director Centro de Investigaciones y Estudios Políticos Estratégicos (CIEPES)
Juane1208@gmail.com
5/01/2017
Historiadorhttp://www.blogger.com/profile/06283244937285398987noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-6371381920980036117.post-54041556503654689862016-12-21T18:34:00.000-08:002016-12-21T18:35:25.810-08:00AYER Y HOY EN TURQUÍA: TENSIONES GEOPOLÍTICAS<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="http://cdn2.uvnimg.com/dims4/default/de41f5f/2147483647/crop/1024x576%2B0%2B43/resize/1240x698/quality/75/?url=http%3A%2F%2Fcdn4.uvnimg.com%2F09%2Fc9%2Fc333fb6b47b49906d66323a57835%2Fandrei-karlov-getty.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" src="http://cdn2.uvnimg.com/dims4/default/de41f5f/2147483647/crop/1024x576%2B0%2B43/resize/1240x698/quality/75/?url=http%3A%2F%2Fcdn4.uvnimg.com%2F09%2Fc9%2Fc333fb6b47b49906d66323a57835%2Fandrei-karlov-getty.jpg" width="400" height="225" /></a></div>
La actual Turquía, ha sido a lo largo de su historia una fuente constante de tensión. Sin caer en determinismos geográficos, se debe señalar que su ubicación corresponde realmente a una constante agresión entre occidente y oriente, por ser un espacio de tránsito en la ruta de la seda y los metales, siendo ocupada sucesivamente por hititas, micénicos, persas, macedonios, bizantinos, árabes, otomanos, conformando un espacio multicultural, que expresa las contradicciones y formas violentas de relacionamiento inter-cultural.
El surgimiento del Imperio Otomano, luego de la caída de Constantinopla en 1453, y el posterior agotamiento y crisis del mismo, con la finalización de la I Gran Guerra (1914-1919), no significó que esas tensiones entre islam y cristianismo, entre autoritarismo/tiranía y democracia finalizarán, al contrario a todo lo largo del siglo XX, se incrementó y mimetizó esos clivajes y se expresan hoy nuevamente, a través de las posturas y el proyecto político del Presidente Erdogan, concretado desde inicios del siglo XXI (2003) y que busca reeditar un Poderoso Estado islámico, acabando de esa manera con una tradición laica impuesta desde 1924, cuando el fundador de la moderna Turquía, Mustafa Kemal Ataturk, separo la religión de los asuntos del estado, a través de la conformación de un ejército fuerte.
Los intentos de Erdogan, por restituir ese estado islámico, lo han alejado de la tradicional gravitación que la Turquía Moderna había tenido hacia los imperios-mundos, particularmente con los EEUU y el papel que ha jugado a los intereses geoestratégicos en la zona mediante su incorporación a la OTAN. No cabe duda, que esas acciones de acercamiento religioso a la conformación de una Turquía regida por las leyes musulmanas, ha preocupado a los EEUU y los Imperialismos-colectivos, por la amenaza que el extremismos religioso ha generado a los intereses de estas potencias en los años recientes.
El recrudecimiento de atentados en EEUU (después del 11 de septiembre de 2001), los ataques en Alemania, Francia, Inglaterra, la situación caótica en Libia y Siria, que ha escapado del control de los intereses en el ajedrez geopolítico del actual Presidente de EEUU, Barak Obama, los ha llevado a realizar acciones encubiertas, que puedan enmarcarse dentro de la denominada “negación plausible”, pero que buscan desestabilizar la poderosa influencia de Erdogan en Turquía. Particularmente llama la atención como después del intento de golpe de estado, encabezado por militares turcos en julio reciente, el Presidente de Turquía comenzó un acercamiento con Moscú y con Vladimir Putin, que aumentó las preocupaciones (y tensiones) en la zona.
Erdogan no lo ha dicho a viva voz, pero sí ha dejado entrever los posibles apoyos que tuvo el movimiento militar en su contra de los imperialismos colectivos y por ello, el viraje geoestratégico que lo ha llevado a entrevistarse con Putin y establecer un acercamiento económico y geopolítico, que se traduce en una seria amenaza a los intereses de la Otan y los EEUU en ese espacio geográfico, tradicionalmente tan disputado.
El reciente asesinato del Embajador ruso en Ankara, capital de Turquía, tiene todas las características de ser una jugada de organismos de inteligencia destinada a generar una reacción extrema de los radicalistas rusos. No obstante, la fría y calculadora mirada de Putin, ha frenado esa acción que sin embargo muestra las terribles tensiones entre oriente y occidente. La disputa sigue siendo entre una sociedad laica, impuesta desde inicios del siglo XX y las pretensiones de Erdogan de restituir el viejo califato otomano y la notoria influencia religiosa en la zona. En ese juego de tensiones, Erdogan con una gran astucia e inteligencia, ha cambiado la carta de juego y se ha acercado a Rusia, generando importantes reacciones (y preocupaciones) en las agencias de inteligencia de EEUU, Inglaterra, Francia y Alemania, más aun sabiendo el papel que se le ha asignado a Turquía en la desestabilización de Siria.
El asesinato del Embajador Ruso, tiene parangón, tal como lo ha señalado nuestro querido amigo Atilio Borón, con el asesinato del archiduque Fernando en los inicios del siglo XX, que dio origen a la I Gran Guerra. No obstante, está jugada provocadora pareciera no haber alcanzado sus objetivos, pues no hubo una respuesta en términos de ruptura de relaciones entre Rusia y Turquía y mucho menos, unas escalada militar rusa, exigiendo una acción contundente contra quienes se responsabilizaron del asesinato. El actual Presidente turco, se mueve en una frágil línea entre sus posiciones históricas de articulación con occidente, que lo han llevado a intervenir en Siria o su virtual acercamiento con Rusia, que le ha permitido colaborar en la derrota de los extremistas islámicos en Aleppo. En términos geopolíticos, es de esperar un recrudecimiento de las acciones extremistas en Turquía, bien por los movimientos islamistas o bien por los aparatos de inteligencia de los países miembros de la OTAN, que siguen viendo con preocupación las posiciones de Erdogan en torno a una Nueva Turquía, más islamista y peligrosamente (para ellos) cerca de Putin.
Hay quienes creen ver en este asesinato el inicio oficial de una III Gran Guerra, sin embargo, la misma ya comenzó solo que la posibilidad de destrucción de la humanidad es más inmediata que la amenaza que representó la crisis de los misiles en Cuba en 1962. Esta nueva Guerra, la comenzó los EEUU formando una coalición contra Afganistán e Irak, e iniciando la amenaza sobre Siria, lo demás son consecuencias de sus actos.
Estamos ante una situación de gran presión, pues las dos grandes potencias de la 2da mitad del siglo XX, EEUU y Rusia, están en una pulseada histórica que tiene como epicentro Turquía y sus alrededores, amenazando con extender ese conflicto hacia China y el resto de los imperialismos-colectivos. Las perspectivas de un incremento de las tensiones en la zona, ante el hecho contradictorio de las posiciones pro-islamistas de Erdogan, que viene impulsando la creación de nuevas mesquitas y mayores controles religiosos en Turquía y su acción ambigua con respecto al Estado islámico, es notoria. De nuevo, tal como sucedió en siglos precedentes Turquía es foco del enfrentamiento en un espacio geográfico apetecido y anhelado por quienes pretenden constituirse en Imperios-mundo en la actualidad.
Dr. Juan Eduardo Romero
Historiador/politólogo
Director Centro de Investigaciones y Estudios Político Estratégicos (CIEPES)
Juane1208@gmail.com
20/12/2016
Historiadorhttp://www.blogger.com/profile/06283244937285398987noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-6371381920980036117.post-40278561673732600572014-10-09T20:04:00.000-07:002014-10-09T20:04:16.355-07:00Sabino y Serra: asesinados por el miedo
SABINO Y SERRA: ASESINADOS POR EL MIEDO
La muerte como filosofía esencial del mundo occidental, decadente, inhumano se empodera con cada acción y en cada instante. El mundo se constituye en torno a la muerte (de la naturaleza a través de la depredación del entorno, del hombre a través de asesinatos selectivos) y ella viene acompañando las expresiones de la guerra, como negocio, como práctica. La muerte de Robert Serra, miembro del PSUV, legislador, cuadro político ha sido acompañada de muestras de dolor, de denuncias sobre el impacto del paramilitarismo, del sicariato, del peligro que amenaza al proceso bolivariano, espejo de un anhelo de transición anti-capitalista .
La estructura del Estado se ha activado, los medios se han ocupado reflejando en sus portadas, en sus portales diversas incidencias sobre el suceso. No criticamos eso, pero creemos que está muerte, al compararla con otra acaecida en el Estado Zulia, guarda similitudes preocupantes pero reacciones disimiles . Nos referimos al asesinato del líder indígena de la Sierra de Perijá Sabino Romero, miembro de la comunidad Yukpa.
Sabino y Serra compartían una identidad común: sus liderazgos eran indiscutiblemente de raigambre popular. Su desenvolvimiento en torno a las comunidades de la Sierra de Perijá del primero y alrededor del 23 de enero y la Pastora, del segundo, así lo demuestran. De alguna manera había una coincidencia paradigmática entre ambos , sólo que la forma de expresarse esa coincidencia tenía contextos diferentes. Serra optó por los canales formales dentro de la actividad partidista y dentro del Estado, mediante su papel como diputado. Sabino, optó por el camino más difícil: el de la autonomía que lo llevo a enfrentarse con las posturas del Gobierno Regional, encabezado por el Gobernador del Estado Zulia, Comandante Francisco Arias Cárdenas. Sin duda, una actuaba a la par de las instituciones del Estado y otro, se enfrentaba a ellas, por la falta de respuestas a los problemas ecológicos y sociales que afectan a las comunidades yukpas.
Ambos se manejaban con posturas anti-capitalistas, pero en vertientes diferentes. Para Serra la expresión de su anti-capitalismo tenía un componente anti-imperialista, anti-liberal . Para Sabino, su anti-capitalismo se manejaba en el campo de la ecología política, lo que dentro del Plan de la Patria se denomina eco-socialismo. Serra se confrontó con los intereses de los grupos propietarios en la capital y su accionar conspirativo contra el Estado Bolivariano. Sabino, se confrontó contra los intereses propietarios que históricamente han despojado a los Yukpas de sus territorios, en nombre del desarrollo económico ganadero, contando con la anuencia de gobiernos regionales adecos y copeyanos y con la mirada complaciente del Gobierno Socialista de Arias Cárdenas.
Serra y Sabino, resultaban piezas incómodas en la lucha entre las lógicas de la muerte, características del mundo liberal-capitalista y el derecho a la insurgencia, eso es a oponerse a las formas de dominación. Su coincidencia, su valor, su compromiso es indudable. Hasta acá las semejanzas. Al ahondar un poco más en sus asesinatos, nos damos cuenta que son una consecuencia de acciones de Guerra psicológica, que buscan inhibir la organización, las formas de resistencia y combate contra las injusticias, asumiendo la violencia extrema (la muerte) como bandera para lograrlo. A Serra lo asesinan de más de 30 puñaladas, a Sabino lo masacran a tiros cuando bajaba de su comunidad. Ambos son crímenes de terror. Crímenes políticos.
Ambos tienen efectos de desmovilización. Uno, el de Serra es un mensaje de amedrentamiento contra los que dentro del PSUV se dedican al trabajo político con las comunidades. El otro, es un mensaje contra las luchas y los derechos de los pueblos originarios. Sin embargo, la reacción es diversa. Serra al ser parte del Estado, como diputado, como representante del pueblo es objeto de una atención de los fiscales, que permite (según noticias divulgadas) la identificación de los autores materiales en menos de 48 horas, avanzando aún las investigaciones. El asesinato de Sabino, no ha tenido la misma respuesta . A pesar que el cineasta Carlos Azpúrua entregó a Fiscalía un documental donde el cacique Sabino Romero daba nombre de algunas personalidades del Sur del lago que pudieran estar detrás de un atentado en su contra (Ultimas Noticias 4/03/2013).
El accionar de las estructuras del Estado también ha sido disímil, a pesar que como lo demostramos ambos son combatientes del anti-capitalismo, del anti-imperialismo. A nivel nacional, se le ha rendido un homenaje significativo a Serra, los medios nacionales (públicos y privados) se han hecho eco de sus luchas. El Gobierno de Arias Cárdenas en el Zulia, realizó tremendos actos en la Plaza Bolívar en honor a Serra. Con Sabino, el silencio incómodo y cómplice. ¿Acaso hay diferencias en torno al valor de resistencia y de combate de ambos asesinados? Creo que no. Lo más doloroso es la reacción del Gobierno Bolivariano de Arias Cárdenas en el Zulia, que no ha cumplido con los compromisos ni las promesas hechas al cacique, en torno al respeto a la Sierra y la resistencia a la explotación del carbón. La peor burla, es la del proyecto de la Gobernación del Zulia, de reiniciar la explotación de las minas de carbón, afectando las condiciones de vida, el hábitat, el entorno natural de la Sierra y olvidándose (por los intereses trasnacionales) del compromiso con el Objetivo 5 del Plan de la Patria . Cosas vides sancho, decía El Quijote.
Dr. Juan Eduardo Romero
Historiador/politólogo
Juane1208@gmail.com
6/10/2014
Historiadorhttp://www.blogger.com/profile/06283244937285398987noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6371381920980036117.post-65581921198701288372014-09-17T18:19:00.003-07:002014-09-17T18:19:04.000-07:00El secuestro del Psuv en el Zulia<a href="http://panorama.com.ve/portal/app/push/noticia127607.php#.VBoxmrmqaBY.blogger">El secuestro del Psuv en el Zulia</a><br /><br />
<br /><br />
<div class="MsoNormal">EL SECUESTRO DEL PSUV EN EL ZULIA<o:p></o:p></div><div class="MsoNormal" style="text-align: justify;"> La<br />
situación en el Zulia es delicada y estratégica. Delicada pues hay una<br />
articulación silenciosa de factores internos en el PSUV, que solapadamente se<br />
vienen alejando del proyecto socialista bolivariano. Estratégica pues la<br />
configuración geopolítica de la región, los peligros de la vecindad con<br />
Colombia, la configuración de los sectores conservadores/propietarios,<br />
tradicionalmente ligados a las relaciones de poder económico y social,<br />
constituyen una amenaza constante en términos de la unidad territorial con el<br />
resto de Venezuela, el papel geoeconómico de la región pero más importante aún,<br />
en términos de las estrategias de EEUU y ciertos sectores que se proponen en<br />
este siglo XXI generar nuevas “repúblicas” satélites, tal como ocurre en Libia<br />
o como se plantea en la península arábiga, pero con epicentro desde el Zulia. <o:p></o:p></div><div class="MsoNormal" style="text-align: justify;"> Seamos<br />
más específicos. El PSUV en el Zulia, se ha nutrido de diversos sectores – cómo<br />
sucede a nivel nacional- unos provenientes de la izquierda histórica, que<br />
vienen impulsando una estrategia anti-capitalista desde hace muchos años, otros<br />
provenientes de diversas organizaciones políticas y sociales que nada tienen en<br />
común con el proyecto del socialismo bolivariano propuesto por Chávez y finalmente,<br />
los que provienen de amplios sectores sociales, históricamente excluidos y que<br />
se sienten atraídos por las propuesta de construcción de un socialismo como<br />
alternativa al rentismo capitalista, que ha caracterizado nuestra historia. Pero<br />
hay más sectores, que deben ser considerados. Por supuesto, está un componente<br />
militar que se adhirió como una consecuencia del liderazgo carismático de<br />
Chávez, pero que hoy en día se comporta pragmáticamente. Este sector, ha sido<br />
favorecido en la muy difícil coyuntura de enfrentar a una elite propietaria que<br />
ha sido particularmente adverso al proyecto bolivariano. La idea de Chávez en<br />
principio, fue recurrir al fortalecimiento de estos sectores, que se asumían “comprometidos”<br />
con su Doctrina, pero que en el transcurso del tiempo se fortalecieron<br />
económicamente y adquirieron los “malos hábitos” de los sectores propietarios<br />
tradicionales. No se puede negar, tal como lo ha demostrado Marea Socialista la<br />
enorme cantidad de recursos económicos – dólares preferenciales- que han sido<br />
otorgados a particulares (militares o no) para responder al incremento del<br />
consumo del venezolano y a las crecientes necesidades de productos importados.<o:p></o:p></div><div class="MsoNormal" style="text-align: justify;"> Se<br />
debe entender que el PSUV tiene una problemática significativa, desde sus<br />
inicios: se conformó como una estructura de masas y no de cuadros. Ello<br />
significó, que militan en el partido cantidad de ciudadanos que están ahí, no<br />
por convicción sino por conveniencia. Eso ha sido posible, pues el PSUV es una<br />
organización fácil de penetrar, pues sólo deben vestirse de rojo, declararse<br />
socialistas (sin serlo) y ascender – sobre bases clientelares y burocráticas-<br />
en la estructura de poder. En el Zulia, este proceso o dinámica ha sido<br />
particularmente fuerte, pero aderezado además por un ingrediente peligroso: la<br />
toma del control del partido por parte de esa estructura burocrática,<br />
subsidiaria de las instituciones regionales. Hay un progresivo secuestro de la<br />
estructura dirigencial del partido, que fue nombrada por cooptación y nunca se ha<br />
legitimado, estableciendo no una praxis basada en estrategias<br />
anti-capitalistas, sino una pragmática basada en la conveniencia y el lucro. <o:p></o:p></div><div class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-indent: 35.4pt;">Es vox populi<br />
como dentro del Gobierno Regional hay sectores, con altas responsabilidades que<br />
tienen agendas muy diferentes a las planteadas en el Plan de la Patria.<br />
Sectores cuya agenda es la del lucro y el beneficio económico y que se plasma<br />
en los esfuerzos por redactar un Plan Prospectivo 2040, con asesoría y apoyo<br />
del equivalente en la región al IESA.<o:p></o:p></div><div class="MsoNormal" style="text-align: justify;"> Las<br />
consecuencias de ese Plan, que incorpora a las instituciones universitarias<br />
privadas, a sectores ligados a la elite económica y social (tradicionalmente<br />
enfrentados con el socialismo bolivariano), así como a viejos actores<br />
políticos, ligados a AD y COPEI, serán catastróficas. De ahí surgirá sin duda<br />
la reactivación del proyecto del Puerto de Aguas Profundas, cuya utilidad será<br />
sólo para los representantes de TransCoal, una trasnacional del carbón. Todo<br />
ello con la excusa de la recuperación del Lago. Peor aún, es que ese proyecto<br />
de reactivación carbonífera, de puerto de aguas profundas, es esencialmente una<br />
traición al 5to Objetivo del Plan de la Patria. Lo más asombroso, es el<br />
silencio de la estructura dirigencial del PSUV y ese silencio solo tiene una<br />
explicación: relaciones clientelares. Quién se atreva a levantar una voz<br />
crítica, será drásticamente apartado de la estructura de poder y con ello, dirá<br />
adiós a sus privilegios burocráticos. Nada más alejado de la finalidad de un<br />
partido revolucionario. No creo que un Chávez vivo, estaría muy alegre con lo<br />
que está sucediendo en el Zulia en este momento y peor aún, es que con ese<br />
accionar articulador con las elites propietarias, se pone en peligro (pues se<br />
reactiva un proyecto secesionista) la unidad territorial de Venezuela,<br />
haciéndole un gran favor a los<br />
estrategas que en EEUU juegan a la creación de divisiones, tal como sucedió en<br />
Panamá en 1903. Cosas ves Sancho.<o:p></o:p></div><div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Dr. Juan Eduardo Romero<o:p></o:p></div><div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Historiador/politólogo<o:p></o:p></div><div class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><a href="mailto:Juane1208@gmail.com">Juane1208@gmail.com</a> <o:p></o:p></div><br /><br />
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">15/09/2014<o:p></o:p></div>Historiadorhttp://www.blogger.com/profile/06283244937285398987noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6371381920980036117.post-23923883293031483522014-09-17T18:19:00.001-07:002014-09-17T18:19:00.757-07:00El secuestro del Psuv en el Zulia<a href="http://panorama.com.ve/portal/app/push/noticia127607.php#.VBoxmrmqaBY.blogger">El secuestro del Psuv en el Zulia</a><br /><br />
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<div class="MsoNormal">EL SECUESTRO DEL PSUV EN EL ZULIA<o:p></o:p></div><div class="MsoNormal" style="text-align: justify;"> La<br />
situación en el Zulia es delicada y estratégica. Delicada pues hay una<br />
articulación silenciosa de factores internos en el PSUV, que solapadamente se<br />
vienen alejando del proyecto socialista bolivariano. Estratégica pues la<br />
configuración geopolítica de la región, los peligros de la vecindad con<br />
Colombia, la configuración de los sectores conservadores/propietarios,<br />
tradicionalmente ligados a las relaciones de poder económico y social,<br />
constituyen una amenaza constante en términos de la unidad territorial con el<br />
resto de Venezuela, el papel geoeconómico de la región pero más importante aún,<br />
en términos de las estrategias de EEUU y ciertos sectores que se proponen en<br />
este siglo XXI generar nuevas “repúblicas” satélites, tal como ocurre en Libia<br />
o como se plantea en la península arábiga, pero con epicentro desde el Zulia. <o:p></o:p></div><div class="MsoNormal" style="text-align: justify;"> Seamos<br />
más específicos. El PSUV en el Zulia, se ha nutrido de diversos sectores – cómo<br />
sucede a nivel nacional- unos provenientes de la izquierda histórica, que<br />
vienen impulsando una estrategia anti-capitalista desde hace muchos años, otros<br />
provenientes de diversas organizaciones políticas y sociales que nada tienen en<br />
común con el proyecto del socialismo bolivariano propuesto por Chávez y finalmente,<br />
los que provienen de amplios sectores sociales, históricamente excluidos y que<br />
se sienten atraídos por las propuesta de construcción de un socialismo como<br />
alternativa al rentismo capitalista, que ha caracterizado nuestra historia. Pero<br />
hay más sectores, que deben ser considerados. Por supuesto, está un componente<br />
militar que se adhirió como una consecuencia del liderazgo carismático de<br />
Chávez, pero que hoy en día se comporta pragmáticamente. Este sector, ha sido<br />
favorecido en la muy difícil coyuntura de enfrentar a una elite propietaria que<br />
ha sido particularmente adverso al proyecto bolivariano. La idea de Chávez en<br />
principio, fue recurrir al fortalecimiento de estos sectores, que se asumían “comprometidos”<br />
con su Doctrina, pero que en el transcurso del tiempo se fortalecieron<br />
económicamente y adquirieron los “malos hábitos” de los sectores propietarios<br />
tradicionales. No se puede negar, tal como lo ha demostrado Marea Socialista la<br />
enorme cantidad de recursos económicos – dólares preferenciales- que han sido<br />
otorgados a particulares (militares o no) para responder al incremento del<br />
consumo del venezolano y a las crecientes necesidades de productos importados.<o:p></o:p></div><div class="MsoNormal" style="text-align: justify;"> Se<br />
debe entender que el PSUV tiene una problemática significativa, desde sus<br />
inicios: se conformó como una estructura de masas y no de cuadros. Ello<br />
significó, que militan en el partido cantidad de ciudadanos que están ahí, no<br />
por convicción sino por conveniencia. Eso ha sido posible, pues el PSUV es una<br />
organización fácil de penetrar, pues sólo deben vestirse de rojo, declararse<br />
socialistas (sin serlo) y ascender – sobre bases clientelares y burocráticas-<br />
en la estructura de poder. En el Zulia, este proceso o dinámica ha sido<br />
particularmente fuerte, pero aderezado además por un ingrediente peligroso: la<br />
toma del control del partido por parte de esa estructura burocrática,<br />
subsidiaria de las instituciones regionales. Hay un progresivo secuestro de la<br />
estructura dirigencial del partido, que fue nombrada por cooptación y nunca se ha<br />
legitimado, estableciendo no una praxis basada en estrategias<br />
anti-capitalistas, sino una pragmática basada en la conveniencia y el lucro. <o:p></o:p></div><div class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-indent: 35.4pt;">Es vox populi<br />
como dentro del Gobierno Regional hay sectores, con altas responsabilidades que<br />
tienen agendas muy diferentes a las planteadas en el Plan de la Patria.<br />
Sectores cuya agenda es la del lucro y el beneficio económico y que se plasma<br />
en los esfuerzos por redactar un Plan Prospectivo 2040, con asesoría y apoyo<br />
del equivalente en la región al IESA.<o:p></o:p></div><div class="MsoNormal" style="text-align: justify;"> Las<br />
consecuencias de ese Plan, que incorpora a las instituciones universitarias<br />
privadas, a sectores ligados a la elite económica y social (tradicionalmente<br />
enfrentados con el socialismo bolivariano), así como a viejos actores<br />
políticos, ligados a AD y COPEI, serán catastróficas. De ahí surgirá sin duda<br />
la reactivación del proyecto del Puerto de Aguas Profundas, cuya utilidad será<br />
sólo para los representantes de TransCoal, una trasnacional del carbón. Todo<br />
ello con la excusa de la recuperación del Lago. Peor aún, es que ese proyecto<br />
de reactivación carbonífera, de puerto de aguas profundas, es esencialmente una<br />
traición al 5to Objetivo del Plan de la Patria. Lo más asombroso, es el<br />
silencio de la estructura dirigencial del PSUV y ese silencio solo tiene una<br />
explicación: relaciones clientelares. Quién se atreva a levantar una voz<br />
crítica, será drásticamente apartado de la estructura de poder y con ello, dirá<br />
adiós a sus privilegios burocráticos. Nada más alejado de la finalidad de un<br />
partido revolucionario. No creo que un Chávez vivo, estaría muy alegre con lo<br />
que está sucediendo en el Zulia en este momento y peor aún, es que con ese<br />
accionar articulador con las elites propietarias, se pone en peligro (pues se<br />
reactiva un proyecto secesionista) la unidad territorial de Venezuela,<br />
haciéndole un gran favor a los<br />
estrategas que en EEUU juegan a la creación de divisiones, tal como sucedió en<br />
Panamá en 1903. Cosas ves Sancho.<o:p></o:p></div><div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Dr. Juan Eduardo Romero<o:p></o:p></div><div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Historiador/politólogo<o:p></o:p></div><div class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><a href="mailto:Juane1208@gmail.com">Juane1208@gmail.com</a> <o:p></o:p></div><br /><br />
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">15/09/2014<o:p></o:p></div>Historiadorhttp://www.blogger.com/profile/06283244937285398987noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6371381920980036117.post-34272772601011851672013-07-20T20:30:00.001-07:002013-07-20T20:30:27.983-07:00Inaugurando la Cátedra Hugo Chávez en la Universidad de Buenos Aireshttp://instagram.com/p/cAyCpvneZH/Historiadorhttp://www.blogger.com/profile/06283244937285398987noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6371381920980036117.post-87545499909662614962012-12-29T19:11:00.001-08:002012-12-30T10:13:29.534-08:00Arias Cardenas: Nueva Oportunidad en el Zulia.<p>El triunfo de Arias Cardenas, se produce casi dos decadas despues de haber triunfado por primera vez en 1995. Entre esa victoria y esta hay diferencias importantes. Las condiciones son distintas. En el 95, Arias no contaba con el apoyo de Chavez, que en ese entonces propuso "por ahora, por ninguno". La posicion de Chavez tenia que ver con un balance politico real del momento: todo indicaba que AD y COPEI, no iban a permitir la irrupcion de nuevos actores en el escenario politico, a pesar de la disminucion de su caudal electoral en el proceso comicial presidencial de 1993. En ese escenario, Chavez mantenia la tesis de la conspiracion y tenia sentido, pues a pesar de perder poder de representacion, seguian manteniendo el poder real en terminos operativos.<br>
Arias era de la tesis de penetrar el sistema desde adentro, incrementando la ruptura de los factores politicos ya enfrentados a traves de acercamientos con los movimientos sociales. La facilidad con la que contaba, en el caso del Zulia, venia de las relaciones con el movimiento universitario que estuvo implicado en la insurreccion civica-militar del 4 de febrero de 1992.<br>
Esas relaciones le proveyeron el apoyo social que necesitaba en 1995, para romper ese bloqueo politico. La situacion para 1995, no era facil. AD tenia el control total del Estado Zulia en ese momento. En eso existe una coincidencia con esta eleccion de 2012. Solo que era una derivacion de AD: Un Nuevo Tiempo (UNT). En 1995 como ahora, habia una hegemonia politica que lucio imbatible y con un discurso de amplitud, incorporando a sectores diversos, se avanzo en la conquista de un espacio politico estrategico: el Zulia.<br>
Este nuevo triunfo de Arias parecia imposible despues de las elecciones parlamentarias de 2010. Habia que reconstruir todo el aparato social, factores politicos internos y enfrentar una maquinaria que con el uso del tema de la zulianidad,habia logrado imponerse continuamente desde el 2000.<br>
Arias entendio la importancia de asumir su posicion de esa epoca y realinearse con Chavez. Esta vez,si contaria con su apoyo para las elecciones y al igual que aquella vez en 1995,convoco a los movimientos sociales universitarios a un esfuerzo politico.<br>
El Zulia rememoro su gestion, y voto por eso y la posibilidad de obtener mas del proyecto bolivariano, que seguir enfrentado.<br>
Arias tiene la oportunidad de reandar un  camino que dejo a medio andar en el 2000: la de reinsertar al Zulia en el proyeto nacional.<br>
Se encuentra con un espacio cambiado, por mas de una decada de desalineamiento y confrontacion, con mayor importancia historica dado los problemas de inseguridad y la penetracion del sicariato y el paramilitarismo.<br>
Los zulianos han aprendido una leccion historica, que ya experimentaron el el siglo XIX cuando con Jorge Sutherland y Venancio Pulgar fueron arrastrados a una confrontacion con el proyecto nacional, representado en Guzman Blanco y sufrieron sus consecuencias, cuandos ambos lideres huyeron. Hoy el Zulia experimento lo mismo. Los liderazgos de UNT dejaron al Zulia en el olvido y abandono. Toca recuperarlo y en ello deben estar todos los esfuerzos posibles. El reto es construir una nueva hegemonia, articulada al proyecto bolivariano y que sirva para llevar al Zulia al siglo XXI y al proyecto revolucionario.</p>
<p>Dr Juan E. Romero<br>
Historiador<br>
29/12/2012</p>
Historiadorhttp://www.blogger.com/profile/06283244937285398987noreply@blogger.com22tag:blogger.com,1999:blog-6371381920980036117.post-59807287921184936062012-06-12T06:50:00.003-07:002012-06-12T06:50:52.955-07:00Dr. Juan Eduardo Romero (Venezuela)<a href="http://historiador-juanromero.blogspot.com/2012/06/javier-biardeau-venezuela-7-o-pescar-en.html">Dr. Juan Eduardo Romero (Venezuela)</a>Historiadorhttp://www.blogger.com/profile/06283244937285398987noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6371381920980036117.post-76563696361792470372012-06-12T06:50:00.001-07:002012-06-12T06:50:50.504-07:00Dr. Juan Eduardo Romero (Venezuela)<a href="http://historiador-juanromero.blogspot.com/2012/06/javier-biardeau-venezuela-7-o-pescar-en.html">Dr. Juan Eduardo Romero (Venezuela)</a>Historiadorhttp://www.blogger.com/profile/06283244937285398987noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-6371381920980036117.post-39853474314606028212012-06-12T06:23:00.001-07:002012-06-12T06:23:16.650-07:00Artículo Juan Romero: Venezuela, dinámica política y cambio en los procesos electorales (1998-2010)<a href="http://www.redalyc.org/src/inicio/ArtPdfRed.jsp?iCve=12222378003"></a>Historiadorhttp://www.blogger.com/profile/06283244937285398987noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6371381920980036117.post-49712559670181056612012-06-12T06:20:00.001-07:002012-06-12T06:20:23.005-07:00Javier Biardeau Venezuela 7-O: ¿pescar en río revuelto?<a href="http://www.rebelion.org/docs/150733.pdf"></a>Historiadorhttp://www.blogger.com/profile/06283244937285398987noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6371381920980036117.post-79930099143232871692012-06-12T05:17:00.000-07:002012-06-12T05:17:02.773-07:00ALGUNAS CONSIDERACIONES CONCEPTUALES SOBRE EL COMANDO CARABOBO
Respetados Compatriotas:
Me permito establecer un conjunto de consideraciones teóricas y conceptuales para el desarrollo de la Campaña Carabobo en el Zulia, pues creo es mi deber como militante de este proceso aportar – en el marco de mi especialidad- elementos para un debate enriquecedor y que permita, retomar el control hegemónico del Zulia. Sobre todo basado en el especial –y difícil- contexto de un Estado que se ha mostrado esquivo al proyecto bolivariano, en lo que respectas a la concreción de un gobierno regional favorable al ciudadano presidente.
1. INSISTIR EN EL PARALELISMO HISTÓRICO ENTRE LA BATALLA DE CARABOBO EN EL SIGLO XIX Y LA BATALLA DE CARABOBO EN EL SIGLO XXI.
a. La Batalla de Carabobo, se corresponde con la etapa final de la escalada de triunfo revolucionario contra el modelo imperialista hispano. Estuvo precedida por la convocatoria de un armisticio, en donde fue vital la figura de Antonio José de Sucre. Ese armisticio, facilitó el rearmado, reagrupamiento y redirección de las fuerzas patriotas. El período entre la firma del Tratado de Regularización de la Guerra de noviembre de 1820 al inicio de la batalla en junio de 1821, fue empleado para redefinir la estrategia de guerra y fortalecer la unidad de los combatientes patriotas.
b. La batalla de Carabobo en el siglo XXI viene precedido por el lanzamiento de un esfuerzo de incorporar a todos los venezolanos a través de la concreción del Plan Simón Bolívar (2007-2013). Aunado a un constante llamado a diálogo por parte del ciudadano presidente, tanto para sus opositores (Discurso en la Asamblea Nacional enero 2012) como a quienes no militan en el PSUV (conformación del Polo Patriótico). La batalla de Carabobo en el siglo XXI, se ha traducido en el reagrupamiento de la militancia del PSUV, mediante la constitución entre 2010-2011 de la estructura del partido, al mismo tiempo que se le ha dado organicidad al Polo Patriótico, como un soporte de fuerzas sociales con el objeto de conformar un Bloque Histórico Hegemónico.
c. La batalla de Carabobo en el siglo XIX se tradujo en la estrategia definitiva destinada a derrotar los vestigios del imperialismo hispano que aún sobrevivían. Permitió el establecimiento de las bases para el despliegue de la campaña del Sur, que terminaría liberando los territorios del Virreinato de la Nueva Granada, Alto Perú, Quito, llegando a los bordes mismos del Virreinato del Río de la Plata.
d. La batalla de Carabobo en el siglo XXI se corresponde con una etapa nueva en la reorganización regional. No puede perderse de vista, que el proceso venezolano es clave para la continuidad de iniciativas contra-hegemónicas y liberadoras en toda Sudamérica, tales como el ALBA-TCP, UNASUR, BANCO DEL SUR y CELAC.
2. ELEMENTOS TEÓRICOS QUE DEBEN SER PARTICULARIZADOS EN LA COMUNICACIÓN POLÍTICA
a. Debemos diferenciar entre propaganda y comunicación política. La propaganda está asociada a la lógica mercantil-capitalista. Se corresponde con la idea de manipulación de las percepciones con la finalidad de generar “ansías de consumo”. La comunicación política trata de un esfuerzo dedicado a hacer inteligible un mensaje político o programa político. En términos de comunicación política, el escenario venezolano esta polarizado. Hay una imagen sólida del presidente Chávez, con sus atributos (elocuencia, simpatía, credibilidad, experiencia) que debe ser aún más explotada en función de las debilidades del candidato opositor (escaso dominio comunicativo, dispersión, poca experiencia).
b. Insistir en el “juego del oráculo”. El oráculo en la antigua Grecia era un elemento de respuesta a las inquietudes que se tenían. En el contexto del siglo XXI, el oráculo son las encuestas. El efecto que han tenido los estudios de opinión sobre la intención al voto, deben ser fortalecidos. Matemáticamente hay que insistir en la imposibilidad del otro candidato de alcanzar al comandante presidente. No es un simple juego, se trata de “mostrar” la evidencia y deslegitimar los intentos que harán para desmontar esa realidad.
c. Manejar la posibilidad de la estrategia de ENVITE. Es decir, un esfuerzo para “invitar” a Capriles a discutir. Habrán algunos que indiquen que no es necesario hacerlo, dada la ventaja numérica. Creo lo contrario. Aprovechando la capacidad discursiva de Chávez sería una estrategia final para consolidarlo y dejar en evidencias las carencias del candidato de la oposición.
d. Descalificar el voto inútil. Hay que insistir en la economía del voto, a efectos de hacer ver que los resultados de los estudios de opinión deben impulsar al ciudadano a articularse con la propuesta socialista del presidente, no sólo por su propio significado sino también por el hecho de incorporarse al conjunto mayoritario de los venezolanos que piensan que con Chávez se puede vivir mejor.
e. Insistir en el poder de nombrar y el poder de construir contenido. La efectividad del discurso de Chávez se manifiesta en su capacidad de convencimiento. Una estrategia en escalada debe fortalecer este aspecto en detrimento de las debilidades del candidato opositor. El Comando Carabobo debe reproducir las líneas discursivas de la propuesta de >Chávez en cada escenario electoral.
f. Usar la escalada del silencio. Chávez se ha constituido en un actor que es reproducido por aceptación o rechazo. Dada las actuales circunstancias de su tratamiento, no debe abusarse de su presencia física, para ello la estrategia del silencio es imperiosa. Las apariciones discursivas de Chávez deben ser milimétricamente seleccionadas y entre cada una de ellas, debe haber una espiral de silencio que obligue a la oposición a mostrarse y mostrar sus debilidades. El silencio debe ser interrumpido por un efecto dramático (un anuncio importante, un desmentido público, etc).
g. El uso de la afectividad. El discurso de Chávez ha sido caracterizado como carismático, parte de ese carisma tiene que ver con la emotividad. La conexión del presidente con quienes lo apoyan es evidente. Eso es inexistente en el otro candidato y por lo tanto, debe insistirse en mostrar esa conexión entre Chávez y su pueblo. Para ello sería importante reproducir un conjunto de testimonios de la gente, que sustituyan el “silencio escogido” que se está planteando. Esos testimonios deben hacer evidente las sensaciones que el liderazgo del presidente generan y las simpatías que produce.
h. Desmontar el “juego de la magia conceptual” de Capriles. El candidato opositor está empleando una estrategia de transferencia y resignificación. Transferencia para asimilar parte de los elementos conceptuales que fortalecen al candidato-presidente (políticas sociales exitosas, lenguaje popular, aceptación social) para re-significar su posición en el espectro derecha-izquierda. Develar esa estrategia que busca “confundir” a los descontentos con el exceso de burocracia o con los excesos de algunos elementos dentro del partido, es crucial.
i. Mantener el liderazgo en el “juego de los temas”. Capriles no tiene la capacidad de imponer la agenda de discusión. Lo ha intentado pero infructuosamente. A pesar del empleo de la espiral del silencio, el Comando Carabobo debe imponer la agenda temática de discusión. La agenda es la del presidente, la de sus acciones ejecutivas – directamente o a través de los vice-presidentes y responsables del partido- y que lo conectan con las necesidades de los colectivos. Temas como vivienda, seguridad (resaltando los índices de criminalidad y homicidios en los Estados donde hay gobernadores opositores, como Zulia, Táchira, Carabobo y Miranda), empleo, control de inflación, ingresos petroleros, política internacional deben ser sostenidamente nombrados y empleados.
j. La importancia de las etiquetas ideológicas. La estrategia de la oposición es clara: evitar la confrontación en relación al espectro ideológico izquierda-derecha. Este espectro debe reforzarse. Insistir en que a pesar de querer negarlo, Capriles es el candidato de la derecha y Chávez representa la izquierda histórica que no traiciona sus ideales. Además ese espectro debe ser reforzado con el tema histórico: Chávez hoy representa la lucha contra el imperialismo, tal como hizo Bolívar en el siglo XIX. Chávez – como Bolívar- es la encarnación de una alternativa revolucionaria a la dominación imperialista.
3. LA PARTICULARIZACIÓN DE LA CAMPAÑA EN EL ZULIA
a. La necesidad de especificar los temas para el zuliano. La estrategia del Comando Carabobo en el Zulia debe ser específica. El eslogan Chávez el Zulia esta con vos es un buen comienzo, pero no es suficiente. Debe venir acompañada por una propuesta del Socialismo del Siglo XXI para el Zulia. Esa propuesta debe construirse sobre un plan general de inserción de las potencialidades (y necesidades) del zuliano en el contexto del Nuevo Plan (2013-2019).
b. La evidencia del fracaso. A esa estrategia inicial de especificar los temas de la campaña en el Zulia debe acompañar la estrategia de la evidencia, es decir, mostrar como el discurso regionalista de la zulianidad (tan usado por la MUD y UNT en el Zulia) es un cascarón vacío, lleno de lugares comunes que han sometido al zuliano al descuido y la desidia.
c. Establecer una asociación histórica. El Zulia del siglo XIX, con Venancio Pulgar y Jorge Sutherland empleo el “orgullo zuliano” como un arma política. Entre 1863 hasta después de 1874, esos dos personajes históricos tuvieron la hegemonía y el control político del Zulia. Impulsaron un enfrentamiento o alineamiento – depende de la ocasión- con el poder central, de acuerdo a sus propios intereses. Cuando les convenía estaban de acuerdo con el gobierno central, tal como lo hizo Pulgar antes de 1862, para pasar a oponerse a partir de 1863. Lo mismo ocurrió con UNT. Debe resaltarse que Rosales se articuló inicialmente con el gobierno de Chávez en el período 1999-2001 y que posteriormente se confronto con él, haciendo uso del discurso regional.
d. Emotividad de la campaña de Chávez y Arias en el Zulia. La aceptación del liderazgo de Chávez, las simpatías que desata así como la asociación (y recuerdo) del buen gobierno de Arias Cárdenas (1996-2000) en el Zulia debe ser empleado. Arias debe reforzar su conexión con el zuliano, con una emotividad que rememore el mayor beneficio que obtendrían los zulianos con un gobernador con excelentes relaciones con el gobierno central. Para eso la propuesta Zulia: socialismo Siglo XXI debe elaborarse y asociar a Chávez- Arias con futuras candidaturas de Alcaldes y concejales.
Estas sugerencias deberían permitir obtener un excelente resultado electoral en el Zulia, que numéricamente le dé una base sólida al triunfo del presidente. El debate y la articulación con los medios comunitarios, con la red del sistema nacional de medios públicos, así como de todos aquellos que generamos opinión públicas es más que necesaria. Debemos intentar pasar por encima de aquellos intentos individuales – esencialmente ególatras- de protagonismo y conformar una base sustancia – y amplia- de apoyos en el área de comunicación, acompañada por estudios de opinión que recojan acertadamente las percepciones de los colectivos sociales.
Atentamente
Dr. Juan E. Romero
Historiador
Militante socialista
Juane1208@gmail.com
31/05/2012.Historiadorhttp://www.blogger.com/profile/06283244937285398987noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6371381920980036117.post-27789384554000501492012-06-12T05:14:00.000-07:002012-06-12T05:14:24.110-07:00CHÁVEZ Y LOS 5 OBJETIVOS HISTÓRICOS
El discurso del presidente Chávez, en el acto de inscripción de su candidatura para las elecciones del 7 de octubre del presente año, señala varias diferencias con su rival, el candidato de la oposición Henrique Capriles Radonski. Hay un 1er conjunto de diferencias, signadas por la estructura discursiva y la capacidad de hilvanar un conjunto de ideas en un lapso bastante prolongado (más de 3 horas). En este conjunto de expresiones se observo un individuo que desmiente las versiones de una enfermedad terminal. Físicamente resulta inaudito pensar que una persona que este – como lo han sostenido medios nacionales y extranjeros- en una etapa inminente a su muerte pueda no sólo mantenerse de pie dando un discurso, sino que además este discurso este provisto de unidad temática, coherencia y significado.
Al comparar las inscripciones de candidaturas, se observa no sólo una diferencia – evidente- en cuanto a la extensión del discurso ( Capriles cerca de 22 minutos incluyendo las largas pausas y Chávez 180 minutos sin pausas), hay una diferencia más profunda: la capacidad de trasmitir y conectarse con la emotividad de las personas. El día domingo 10 de junio, observamos un Capriles dudando en la estructura sintáctica y gramatical de su discurso, aunado a los evidentes vacios conceptuales y a sus infructuosos intentos de mostrar emoción (Te quiero Venezuela¡). El lunes 11 de junio, se vio a un Chávez conectado, sensibilizado con los colectivos, con sus seguidores. Asistimos a un discurso que demuestra lo que expreso ese gran pensador francés Michell Foucault: un discurso que es dicho, es decir, un discurso que se reproduce por aceptación o por rechazo. Esa reproducción está relacionada con diversos elementos. Uno de ellos es la capacidad de vincular el mundo personal – el del ser humano, no el del presidente- con otros mundos personales de los grupos de personas que lo rodean. Se corresponde a una capacidad de lectura de ciertos temas que son considerados esenciales a la propia condición humana. Otro elemento evidenciado, es la insistencia en colocar en el campo de la discusión ciudadana tópicos (lexías) que se relacionan con la vida cotidiana de todos (seguridad, empleo, medio ambiente, prosperidad).
En este 1er conjunto de elementos el balance es claro: un candidato que da una muestra de coherencia enunciativa, paradigmática, con capacidad para mantener atento a un público que ha marchado, que se ha movilizado. En este conjunto de elementos ambos candidatos hicieron uso de manifestaciones de fortaleza física. Capriles caminando cerca de 10 kilómetros con el objeto de mostrarse como lo que es: joven y dinámico. Chávez manteniéndose parado por más de 180 minutos continuos. Esas manifestaciones físicas tienen sentidos simbólicos diferentes: para Capriles se trata de mostrar que él es un candidato dinámico, que da demostraciones de fuerza que buscan sean contrastada con un candidato – supuestamente- enfermo. Por su parte, Chávez mostró una presencia física que ridiculiza los rumores, las especulaciones tejidas por la agenda mediática. Su presencia física genera un efecto tranquilizador en los bolivarianos, quienes tenían una duda razonable sobre sus condiciones de salud.
Hay un 2do conjunto de diferencias, propias de la propia significación de las ideas presentadas. El candidato Capriles se mostró dinámico – eso nadie lo duda- pero carente de profundidad y convencimiento en su estructura discursiva. Los constantes vacios en la articulación del discurso, hacen ver un hombre que no es capaz de mantener una lógica de significados y significantes en temas que pueden alcanzar sensibilizar a los ciudadanos. Al abordar áreas como seguridad, empleo, no logro convencer con una propuesta que se sintiera con conexión a los profundos sentires de la población. Observamos un discurso que pasaba de unas ideas – desconectadas, sin sentido- a otras sin alcanzar definirlas en profundidad. Por su parte, el discurso de Chávez – más allá de su extensión temporal- mostro mantener intacta las ventajas de un liderazgo carismático y emotivo. El recurrir a elementos de emotividad le permitió mantenerse conectado con unos colectivos que se han mostrado preocupados por su estado de salud. Sin embargo, más allá de eso, en este 2do conjunto de elementos vimos una clara definición ideológica. Capriles por su parte, aunque intento establecer comparaciones, no lo hizo sobre la base de la construcción de un “ellos” y un “nosotros” que los colocara en el espectro derecha-izquierda en el cual se ubican tradicionalmente los ciudadanos.
El discurso de Chávez se emotivizó al mismo tiempo que se posicionó como un discurso de izquierda, nacionalista y anti-imperialista. La propuesta que esbozo bajo la idea de objetivos históricos nos muestra una perspectiva – o más bien prospectivo por su visión de futuro- que coloca al proceso venezolano con un amplio sentido histórico, pero además como una respuesta ante la crisis de acumulación – y depredación- del sistema capitalista. Cuando Chávez señala como prioridad la independencia, lo plantea como una respuesta a la articulación en red bajo la dictadura del capital, que lleva a los Estados Nacionales a adaptarse y acoplarse a las necesidades de acumulación de riqueza del sistema-mundo y que son la base de las diferencias en la distribución de la riqueza. Asimismo sucede con la idea de construir un modelo de socialismo que se aleje de las perversiones del socialismo real soviético o cubano, y otro tanto con la necesidad de transformar al país en una potencia que canalice – y encabece – iniciativas de articulación de esfuerzos gran-nacionales que construyan alternativas a las formas de control y expoliación capitalista. Para ello, la contribución a elaborar alternativas pluripolares como UNASUR, la CELAC, ALBA y banco del Sur, son una necesidad histórica. Para Chávez, un proceso como el venezolano no puede sobrevivir sin lograr llevar más allá de sus fronteras la propuesta de transustanciación social y cultural. Finalmente, todo ello conduce a la prioridad de lograr sobrevivir a las propias dinámicas destructoras de la vida, propiciadas desde la lógica expoliativa del capitalismo. En conclusión, fuimos testigos de una confrontación de ideas que dejo en claro quién es quién en el campo ideológico.
Dr. Juan E. Romero
Historiador
Juane1208@gmail.com
11/06/2012Historiadorhttp://www.blogger.com/profile/06283244937285398987noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6371381920980036117.post-78179981305333689252012-04-10T10:31:00.001-07:002012-04-10T10:31:58.157-07:00LECCIONES DEL 11 DE ABRIL: 10 AÑOS DESPUÉS
Hemos insistido en identificar – no hemos sido los únicos- un conjunto de elementos que se enmarcan dentro del ámbito conceptual de las Guerras Sicológicas (GUS) u Operaciones de Guerra Sicológica (OPSIC), definidas como acciones destinadas a lograr – a través del uso de sofisticadas herramientas tecnológicas, audiovisuales y propagandísticas- cambiar la percepción de la realidad de los individuos con el fin último de alcanzar un control de las sociedades y las mentes. Las operaciones de guerra sicológica se corresponden a una última etapa en la evolución conceptual de las guerras, como consecuencia del alta impacto y desarrollo tecnológico, propiciado por la revolución informática desatada a finales del siglo XX y lo que va del siglo XXI.
Las OPSIC, se corresponden además, con un planteamiento de sustitución de las operaciones de las guerras convencionales, donde jugaban un papel esencial la movilización de tropas y armamentos, por procesos menos evidentes – pero más efectivos- desarrollados a través de unidades mediáticas o círculos de conocimiento (think-thank). Teniendo claro estos elementos conceptuales, expresados en forma generalizante, podemos analizar los sucesos del 11 de abril de 2002 en el marco de una gran acción de OPSIC. Se debe comenzar estableciendo el marco conceptual – o cognitivo (de percepción)- que sirvió de base para el inicio de las operaciones de guerra sicológica. Ese comienzo se corresponde con el contexto político de formulación de las Leyes Habilitantes (LH) en los meses finales del año 2001. Esas LH(49 en total) planteaban áreas claves, tales como: petróleo, tierras, función pública, planificación, pequeña y mediana industria, fondo de inversión para la estabilización macroeconómica (FIEM), de puertos, identificación, entre otras; que resultaban esenciales para el desarrollo y avance del proyecto bolivariano (PB) formulado inicialmente en 1992 y aplicado – con modificaciones- a partir de 1999; y cuyas líneas generales conllevaban una confrontación con los intereses de clase y los objetivos de los grupos propietarios que históricamente se habían asociado con los actores políticos tradicionales (AD-COPEI) para usufructuar el poder.
Los titulares de prensa – el marco o framing-, las opiniones de operadores armadores de matrices de finales del año 2001, hablaban del caos inminente producto de la “proximidad del comunismo” adelantado por el gobierno de Chávez y que sumiría a los venezolanos en una conmoción desastrosa. Esa operación sicológica, está enmarcada dentro de procesos de extrapolación – sacando los hechos de su contexto- y generalización. En ese marco o framing, es que debe entenderse la acción de paralización que conjugo esfuerzos de la CTV y FEDECAMARAS el 10 de diciembre de 2001, buscando crear indignación en los colectivos y llamar la atención sobre la incapacidad institucional del nuevo gobierno bolivariano. Esa acción de “calentamiento de calle” no tuvo los efectos caóticos esperados, pero sí señalaba el comienzo de unas acciones concadenadas que buscaban articular la salida no institucional del gobierno democráticamente elegido en 1998. A esa situación perceptiva de incapacidad y caos, se le sumaria a finales de enero y principio de febrero de 2002, las marchas en apoyo a la democracia representativa ejercida entre 1958-1998 y el pronunciamiento de un conjunto de militares, que hacían público su inconformidad con el presidente y sus formas de acción pública. Esos militares iniciaron el “goteo” de elementos de la sociedad – o de una parte interesada de ella- en contra del gobierno. Se trataba de crear una percepción de proyección con el caos y el desastre que el fracaso del socialismo real soviético había creado en la URSS. El mensaje era claro: los venezolanos íbamos directo al repetir los errores y desastres de la URSS comunista y nadie mejor para advertirlo que un grupo de militares, entre los que estaban el Coronel Pedro Soto de la aviación y el capitán Luís García Morales de la Guardia nacional, que llamaban a conformar una Junta Patriótica (JP) contra el gobierno de Chávez.
Son ellos los 1eros en hacer pública la fórmula que sería utilizada en abril de 2002: la asociación entre militares y civiles para forzar una acción colectiva. Entre febrero y marzo de ese año, se producen protestas de otro sector importante de la sociedad venezolana: los trabajadores – o un grupo de ellos- de la principal industria generadora de ingresos: PDVSA. La causa de la protesta tenía el mismo “encuadre” que los pronunciamientos de FEDECAMARAS Y los militares: la incapacidad del gobierno. En ese caso – de la industria petrolera- tenía el ingrediente que los generadores de la protestas lo hacían bajo la idea de la “meritocracia” o mejor dicho, la capacidad técnica y profesional de un conjunto de individuos sobre otros – dentro del gobierno de Chávez- que no “conocen” la industria y pueden causar un caos en la misma. La verdad: la acción del presidente de PDVSA, Gastón Parra Luzardo, conducía a reformular en el marco de la Ley orgánica de Hidrocarburos (LOH) el papel de la industria como un Estado dentro del Estado. Todo ello, con conexión en organismos de inteligencia que actuaron desde la Embajada de los EEUU en Caracas, que “tocaron”, “identificaron” y “captaron” a elementos de la iglesia católica, de los militares, de los grupos económicos y de organizaciones civiles (Queremos Elegir, Gente del petróleo). Se trata en ese marco de los OPSIC, de articular protestas en el marco legal(movilizaciones, exigencias de reivindicaciones), para pasar a acciones de calle que sean penetradas por agentes violentos que procuren actos de desorden público, que deberán ser contenidas por agentes del orden público y en ese contexto producir una conmoción (muertes violentas) que luego justifiquen otras acciones.
Eso fue lo que sucedió el 11 de abril. Las protestas convocadas por FEDECAMARAS, CTV y Gente del Petróleo desbordaron los canales institucionales y cayeron en focos violentos ( “todos a Miraflores” como gritó Carmona Estanga y Carlos Ortega), que luego fueron manipulados a través de los medios (el video de Puente LLaguno de Venevisión) y propició el pronunciamiento de los militares, que desobedecieron a su comandante en jefe (Chávez) para ejecutar un golpe frío, enmascarado como una acción de protesta contra un gobierno caótico y violento. La OPSIC fue todo un éxito. Desde militantes del MVR, hasta opositores de Chávez fueron confundidos en su percepción. Unos creyendo que sí renunció, otros sosteniendo que el propio presidente ordenó disparar a la marcha. El resultado el mismo: la justificación de una ruptura institucional el 12 de abril.
La cronología de los hechos muestra como se produjo una perfecta articulación de un conjunto de acciones, generadas desde diversos sectores y actores, que se conjugaron para producir el efecto deseado: desestabilizar y producir una crisis emotiva o de percepción de los ciudadanos, generando indignación, histeria colectiva, caos y desorden. Tal como se planteó, debe establecerse el inicio el 10 de diciembre de 2001, con el paro general de FEDECAMARAS, con ello se construye la imagen de conflicto social y caos productivo que crea zozobra en la población. Posteriormente el 23 de enero, se convocan sendas marchas – tanto el gobierno como la oposición- en conmemoración al derrocamiento de la dictadura. Se trataba de generar acciones de calle cuyo objetivo era producir un “calentamiento social” en forma de movilización colectiva, que canalizara descontentos sociales hacia el gobierno. En el caso de la movilización de sectores sociales cercanos al gobierno, se trataba de una lucha por la presencia en los escenarios públicos, es en conclusión, una “territorialización de la política”, que expresa el control espacial que se trataba de ejercer sobre la presencia en la calle.
Como otra acción de esas OPSIC, se busco generar fraccionamientos hacia lo interno de los sectores de apoyo al presidente Chávez. Ese fraccionamiento procura producir la percepción de fracaso entre los propios adeptos del proceso bolivariano y con ello, buscar fortalecer a quienes se le oponen. En el caso de los sucesos del 2002, el 25 de enero se produce la salida de Luis Miquilena, quién fuera figura clave en el triunfo electoral de Chávez en 1998, fue coordinador de la Asamblea Nacional Constituyente y Ministro del Interior hasta ese año. Esa deserción fue manipulada mediáticamente para hacer ver que era producto del descontento con el manejo del gobierno por parte de Chávez, una muestra más en ese esfuerzo por “crear” la percepción de incapacidad.
Posterior a eso, se genera el pronunciamiento de los militares –finales de enero, principios de febrero- de diversos componentes: aviación (Coronel Pedro Soto), Guardia nacional (Capitán Luís García Morales) y Armada (Contralmirante Carlos Molina Tamayo). Esa acción buscaba mostrar la debilidad institucional en el sector castrense, creando así la base para el futuro pronunciamiento de abril. La percepción: los militares no están con Chávez. La operación sicológica cuyo objetivo era propiciar el rumor, el temor, el miedo estaba en pleno desarrollo y en forma exitosa.
El 25 de febrero, se interviene PDVSA, mediante la designación de un nuevo presidente: el Dr. Gastón Parra Luzardo, profesor emérito de la Universidad del Zulia, experto petrolero, quién anuncia el inicio de una política de revisión del papel de la industria en el marco del proceso bolivariano. Ese anuncio, permitió que la organización Gente del Petróleo – que hoy se sabe recibiera financiamiento de la NED y USAID- se manifestara en nombre de la “meritocracia” contra esas acciones. La percepción que se impuso fue que la industria estaba siendo manejada por personas que desconocían el funcionamiento de la industria y que con eso, se causaría un daño económico al país. Se estaba en presencia de una generalización, que buscaba crear temor, miedo pero sobre todo un “marco interpretativo”: el gobierno no sabe lo que hace.
Gente del Petróleo, inició una paralización de actividades, que poco a poco, bajo ese marco perceptivo incorporó a gerentes, supervisores, trabajadores en general en una oleada de protestas y acciones de movilización que generaban una confrontación con la directiva nombrada por el presidente Chávez. Mientras eso sucedía, desde sectores muy diversos – económicos, políticos y sociales- se propiciaba la conjunción de esfuerzos entre FEDECAMARAS, la CTV, los partidos políticos, la iglesia para formular un PACTO de GOBERNABILIDAD, que en la práctica era un plan de transición que preparaba el terreno para el golpe de estado de abril. Sin embargo, la iniciativa fue presentada como un esfuerzo para buscar una salida pacífica de esos sectores, por parte de los medios de comunicación y los operadores comunicacionales. Se trataba de un cambio en la percepción: presentar un plan desestabilizador y conspirativo como una iniciativa institucional de negociación y paz. De esa forma fue presentada y en ese marco fue repetido por la agenda política (partidos y actores) así como por la agenda pública (opiniones del ciudadano).
Se estableció un accionar que hoy se repite: los planes del candidato de la MUD, Henrique Capriles Radonski, se presentan como una salida a la crisis venezolana, a pesar de sostener la revisión del papel del PDVSA, las misiones y otros planes del gobierno. La intervención de intereses foráneos, representados en acciones encubiertas por parte de funcionarios ligados a la embajada de EEUU, ayer como hoy es evidente. La matriz es la misma: el peligro que representa el gobierno de Chávez para los intereses estratégicos de los EEUU en la región.
Hace 10 años, esa acción encubierta tenía como marco los efectos que la convocatoria de la Cumbre OPEP en el año 2000 por parte de Chávez en Caracas tuvo, para la recuperación de los precios del petróleo. Hoy, la acción encubierta tiene por motivación el hecho que Venezuela cuenta con las reservas probadas más importantes de la actualidad (295.000 millones de barriles), que le brinda una capacidad económica que resulta incómoda a esos intereses continentales.
Todo estaba servido para la acción del golpe: los medios dispuestos a crear – y sostener- unas matrices informativas que creaban una percepción errada de la realidad, los actores económicos que colaboraron para un llamado a paro que creaba condiciones de precariedad y temor, los actores políticos que multiplicaron un discurso movilizador, sobre la base de esos temores creados mediante percepciones manipuladas y finalmente, los actores militares, que actuaron cuando se propició una movilización opositora que en forma provocativa busco un choque violento, que justificara una acción coactiva, bajo cuya excusa pudieran actuar los militares, para violentar el orden institucional. Debe recordarse, como Venevisión – uno de los principales canales privados de Venezuela- reconocía el 12 de abril, a través de uno de sus operadores comunicativos el papel primordial que tuvieron ciertos medios en el apoyo a la movilización contra Chávez.
No queda duda, que el uso de los medios, como palanca comunicativa, en el objetivo de crear esas falsas percepciones fue – y sigue siendo- vital para el desarrollo de los acontecimientos. Al respecto, es poco lo que se hace desde las estructuras del Estado para minimizar el impacto de los medios privados sobre la capacidad de generar opinión en los públicos. Como es sabido, los principales canales privados en Venezuela (Venevisión, Televen, Globovisión) superan en cobertura informativa y raiting a los canales del Estado (VTV, TVES). Los medios impresos privados superan en una relación 4 a 1 a los medios públicos. Las radios privadas siguen siendo superiores en número que las radios comunitarias, cuyo radio de acción es limitado. En este aspecto, aún hoy persiste un peligro latente, concretado en el control de los espacios radioeléctricos en nuestro país, por parte de sectores ligados a los grupos económicos más poderosos.
Las OPSIC, tienen como objetivo hoy un conjunto de temas claves: la enfermedad de Chávez, las fallas eléctricas, las carencias de productos alimenticios, la inseguridad, la falta de pericia en el manejo de los asuntos públicos, que son planteados para generar – de nuevo como en abril de 2002- acciones de protestas que terminen en conflictos violentos y se justifique de esa manera la elevación de las contradicciones entre los que apoyan al gobierno de Chávez y quienes le adversan. Todo esto como un recurso pensado como última estrategia ante la imposibilidad de minimizar la brecha en la preferencia al voto entre Chávez y Capriles Radonski para las elecciones de octubre de 2012. Hoy a 10 años del golpe las lecciones siguen vigentes.
Dr. Juan E. Romero
La Universidad del Zulia
Historiador
9/04/2012
Juane1208@gmail.comHistoriadorhttp://www.blogger.com/profile/06283244937285398987noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6371381920980036117.post-53716878329708005262012-03-21T08:20:00.000-07:002012-03-21T08:20:26.562-07:00EL DISCURSO POLÍTICO DE CARA A LAS ELECCIONES 2012
El discurso expresa mucho más que simple palabras, articuladas en frases, adjetivos, sustantivos, verbos o complementos directos o indirectos. El discurso manifiesta una forma de ser y entender el mundo social. Por lo tanto al construirse un discurso, lo que se observa en un ser-sí-mismo en torno al contexto social en el que nos desenvolvemos. Ese ser-sí-mismo, nos señala la forma particular en la que organizamos el mundo social, la realidad que nos toca vivir. Ese discurso, nos manifiesta por lo tanto, las maneras sociales en las que nos vemos y relacionamos con otros.
Eso es vital, al analizar y comprender el discurso político, que expresa las articulaciones y las relaciones de poder que caracterizan un complejo social. Esas articulaciones y expresiones se encuentran matizadas por un elemento ideológico, que se manifiesta en los esfuerzos individuales y colectivos por ejercer – y controlar- el poder, entendido en un sentido weberiano, es decir, como capacidad para modificar el comportamiento de otro. Esa vinculación se establece entre el discurso como expresión social del poder y la interacción- dominante- que el ansia de poder ejerce sobre el discurso. En este sentido, la construcción de un discurso político, como discurso de poder, pone en evidencia el ser y el hacer en relación con la realidad social de los grupos sociales que emiten el discurso. En ese sentido, se debe asumir que el discurso de poder – o contrapoder o contrahegemónico en el sentido gramsciano- no es inmutable. Si algo caracteriza los estudios del discurso, y particularmente los estudios del discurso político, es su característica de mutabilidad, su capacidad de cambio. Este aspecto, es particularmente pertinente para el caso de los análisis de discurso del presidente Hugo Chávez.
Hemos señalado en un conjunto de trabajos realizados sobre el discurso de Chávez -Discurso y filosofía Política en Hugo Chávez (2001), uso e interpretaciones de la historia en el Discurso de Hugo Chávez (2005), el pensamiento socio-político de Chávez (2010)- que se encuentra en él una característica de uso de la idea de crisis y agotamiento, que está presente en el imaginario de los venezolanos en el contexto socio-histórico de finales del siglo XX. Esa idea de crisis, o sobre esa idea de crisis se asigna responsabilidades y obligaciones que en el caso particular de Chávez, tienen a los partidos históricos como sujetos protagonistas. Esa asociación discursiva de la crisis como producto histórico de las acciones de los grupos partidistas, ligados a los partidos AD y COPEI, se manifiesta en un conjunto de marcos interpretativos, entendidos como formas culturales de entender la realidad que nos rodea y que nos permite conectarnos con otros, que comparten esos marcos que sirven de estímulo para la movilización y la acción política. Esos marcos le asignan a los partidos, sus relaciones, sus protagonistas una serie de responsabilidades en los procesos de crisis económica y social que experimentamos los venezolanos en las últimas décadas del siglo XX – de manera intensa, manifestada en ciclos de protestas evidentes desde el año 1989- y que nos condujo a una situación constante de conflictividad y explosión social.
Por otra parte, el discurso de Chávez hace uso de referentes históricos, esencialmente ligados al pensamiento Bolivariano, que se ha traducido en la popularización del mismo en los sujetos sociales. Eso ha generado una particular irritación de los grupos sociales dominantes, quienes han construido una visión antropológica del “Padre Bolívar”. Esa visión está relacionado con elementos que nos enseñan que los padres se obedecen y respetan; de forma tal que las elites políticas ligadas a AD y COPEI que se conectaban con el pensamiento de Bolívar debían ser respetadas y obedecidas, al romper con ese simbolismo, se incentiva un discurso insurgente, peligroso e incómodo en el afán de poder – como dominación- de esos grupos; transformando al emisor del discurso – Chávez- y quienes comparten ese marco interpretativos – los colectivos sociales que le apoyan políticamente a través del PSUV- en sujetos rebeldes, irrespetuosos y socialmente estigmatizados de las convenciones sociales construidas desde Universidades, círculos académicos y Academias.
El discurso de Chávez, es sin duda un discurso de contrapoder, pues a pesar del hecho de ejercer el poder político, culturalmente la dominación del discurso invisibilizador, hegemonizado desde los círculos de poder económico, político y cultural; se mantiene. Ese choque constante, o mejor dicho, la evidencia de ese choque entre un discurso que sigue siendo hegemónico en la sociedad venezolana (escuela, iglesias, medios de comunicación, universidades) y otro, articulado desde nuevas relaciones de poder político, que aún no son totalmente preponderantes en un sentido gramsciano, se evidencia con cada nueva alocución del Chávez. Por eso la presencia de un discurso reinterpretativo de la realidad histórica en sus constantes alocuciones y los efectos que esa reinterpretación tiene sobre prácticas de acción política y desenvolvimientos sociales en los ciudadanos. Se asiste incluso a una redefinición de los usos del espacio y de la política, que hace más evidente las contradicciones de la sociedad global y sus formas de explotación. Por eso es que el discurso político de Chávez se hace tan incómodo a los grupos de poder en el contexto latinoamericano.
Dr. Juan Eduardo Romero
Historiador
Juane1208@gmail.com
21/02/2012
Historiadorhttp://www.blogger.com/profile/06283244937285398987noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6371381920980036117.post-31898014073138571082012-03-21T08:13:00.001-07:002012-03-21T08:15:33.806-07:00LOS TEMAS O AGENDAS DE LA GUERRA SICOLÓGICALOS TEMAS O AGENDAS DE LA GUERRA SICOLÓGICA
Desde mediados de la década de los años 70, del pasado siglo XX, se viene desarrollando el denominado enfoque de “agenda setting”. Este enfoque desarrollado en EEUU, señala que los medios no nos dicen como pensar, sino “sobre qué pensar”. Se trata de entender que los medios de comunicación (impresos, audiovisuales o webs/blogs) señalan un conjunto de temas, que son repetidos automáticamente, construyendo una “agenda” temática que es repetida por la “agenda política” (los actores políticos con visibilidad en los medios y la vida pública) como en la “agenda pública” (la que maneja el ciudadano común).
La agenda setting, muestra como desde los medios se “selecciona” – a través de los periodistas, y de los jefes de información o responsables de medios- cuales temas aparecen en el día a día, permanecen o desaparecen en los noticiarios, en la prensa o en las páginas web o redes sociales. Se trata de “direccionar” las expresiones de los actos de habla de cada ciudadano. Se trata de establecer una línea de dirección de las discusiones, comentarios y análisis que hacemos en nuestra vida cotidiana. Todos los estudios realizados – Latinobarómetro, Datanálisis y otros- demuestran que cada vez con mayor frecuencia, en toda Nuestra América los ciudadanos se informan según lo que es comentado y reseñado en los medios impresos y audiovisuales. Es sobre este estudio – que corresponde a una realidad concreta- que desde los EEUU se adelanta las Operaciones de Guerra Sicológicas (OPGUS) contra Venezuela.
Medios de Comunicación como El Nacional, El Universal, Tal Cual, diarios de circulación regional como El Impulso, La Verdad, El Carabobeño, Amanecer, Versión Final, siguen este enfoque de agenda setting, sobre todo relacionado con un conjunto de temas que podemos enumerar: 1) la salud precaria del presidente, 2) la existencia de disputas internas para definir el sucesor de Chávez, 3)los problemas de inseguridad de los venezolanos, 4) las carencias en el cumplimiento de los programas públicos del Gobierno, 5) la próxima (y segura) crisis alimentaria (leche, carne, café, entre otros rubros claves) y 6) fallas en el servicio público (electricidad, transporte, agua). Todos esos temas conllevan a una misma operación de guerra sicológica: el fracaso inevitable del proyecto bolivariano y por lo tanto, de la construcción de una respuesta contrahegemónica al capitalismo. Esos temas de agenda, vienen acompañados de otros sub-temas, enmarcados en el mismo enfoque de “agenda setting”: 1) el carácter “popular” de la candidatura de Capriles Radonski, 2) la captación del descontento “interno” dentro de las filas del PSUV, procurando un “goteo” de líderes importantes (gobernadores, alcaldes, concejales, diputados, funcionarios públicos de importancia) y 3) la posibilidad de una “transición” no traumática post-Chávez. Se trata de una estrategia, destinada no a los sectores “duros” – militantes, con claridad política- del PSUV, sino aquellos grupos que se han “adherido” oportunamente al beneficio de las políticas del proyecto bolivariano, pero que carecen de un verdadero compromiso revolucionario. Se trata de avanzar sobre las confusiones y la falta de claridad, derivadas de las carencias y debilidades en la formación política, que sí bien ha sido intentado ser superado a través del Sistema de Formación Socio-Política, no ha tenido el éxito esperado.
Debe entenderse además, que el contexto internacional, con un precio del petróleo por encima de los 100 US$, con las necesidades de elevar la popularidad del presidente Obama, inventándose nuevos conflictos que motoricen el “patriotismo” del pueblo norteamericano en un momento electoral, aunado a hechos concretos internos de la dinámica venezolana, manifestado por el innegable liderazgo carismático de Chávez que “nubla y oscurece” el débil discurso de Capriles, la brecha entre la intención de voto en el escenario polarizado Chávez/Capriles. Estas condiciones generan desesperación y alarma en los círculos y redes opuestas – y en plena acción conspirativa- contra el gobierno venezolano. Esta situación ya ha tenido paralelismos en nuestro país: debe recordarse que en los años 2001-2002 se dio un proceso de movilización y agresión violenta (Fedecamaras/CTV/Gente del petróleo) que precedió las acciones del golpe de abril de 2002 y el paro petrolero, basándose en situación de presión social (paralización de la industria petrolera, asesinatos selectivos que impulsen una reacción social) y el “goteo” de personajes ligados al gobierno (Luís Miquilena, militares y políticos).
Por ello, las operaciones de guerra sicológica (OPGUS) vienen perfectamente articuladas y sincronizadas, más aún en el caso venezolano, donde vemos una acción externa – marcada por anuncios sobre la inevitabilidad del desenlace mortal de la salud de Chávez- y otra interna – marcada por “mostrar” un candidato opositor joven y sano, que contrasta con un presidente “enfermo- buscando con ello lograr alcanzar el desplazamiento del poder a los militantes del proyecto bolivariano. El manejo de crisis del derrame en Monagas, la alarma sobre la calidad del agua, la “salida” del Gobernador de Monagas, la visibilización de un Capriles grabado jugando futbol o baloncesto, rumores sobre el deterioro de Chávez, son sólo parte de las acciones iniciales de esta nueva etapa de Guerra Sicológica que antecede el escenario electoral del 7-O. Debemos estar atentos al accionar de esta agenda de medios y sus ejecutores en Venezuela y el exterior.
Dr. Juan E. Romero
Historiador
Juane1208@gmail.com
21/03/2012Historiadorhttp://www.blogger.com/profile/06283244937285398987noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6371381920980036117.post-35457120462818030432012-03-15T10:46:00.003-07:002012-03-15T10:46:59.661-07:00CAPRILES RADONSKI Y LA GUERRA SICOLÓGICA
Guerra sicológica (GUS) u operaciones de guerra sicológica (OPGUS) se denominan las acciones destinadas a generar percepciones, a orientar o direccionar conductas mediante el uso de propaganda, con la finalidad de alcanzar un alto control social de las emociones. Es denominada también “guerra sin fusiles” y forma parte de la las estrategias seleccionadas en los manuales operacionales de la Doctrina de Seguridad y defensa de los EEUU, promocionada en el contexto del Proyecto para el Nuevo Siglo Americano (PNSA). Debemos recordar, que a partir de la finalización de la Guerra del Golfo, que generó la 1era invasión a Irak en 1991, un conjunto de think-tank neoconservadores, entre los que resaltaban Donald Rumfeld, Paul Worfowitz quienes serían durante el gobierno de George W. Bush (2000-2008), Secretario de Estado y Presidente del Banco Mundial respectivamente, propusieron una nueva doctrina.
Este grupo de neocon (neoconservadores) forman parte de los denominados “halcones” del departamento de Estado, cuyo objetivo es el logro de la preponderancia económica y militar de los EEUU sobre sus adversarios históricos (China-Rusia) así como sus aliados (Inglaterra, Francia, Italia, Canadá, entre otros). Estos grupos neocon, han manifestado su preocupación ante el hecho cierto de la vulnerabilidad de seguridad que significa que los EEUU dependan de importar 10 millones de barriles de petróleo, de los 18 millones que consumen diariamente para mantener su ritmo de producción y la capacidad de movilización militar, que les asegura su pretendida hegemonía política. La guerra sin fusiles, se ha vuelto una necesidad ante el hecho que las confrontaciones en Irak y Afganistán – que forman parte de la estrategia del PNSA- les ha costado más 607,4 Billones de US$ entre 2007-2010 en mantenimiento de tropas. Por ello las OPGUS han ido apareciendo presupuestadas en la estructura de gastos del Departamento de Estado. De hecho para el año 2011 por 1era vez se destino un total de 384,8 millones de US$ para GUS exclusivamente para el Comando Sur, cuyas operaciones se extienden hasta el territorio venezolano.
No debe perderse de vista el contexto internacional en el cual se desenvuelve el gobierno de Hugo Chávez. Venezuela cuenta con las reservas de hidrocarburos más cuantiosas del mundo, un total de 298.000 millones de barriles de petróleo, muy por encima de Arabia Saudita – tradicional aliado y proveedor de petróleo de EEUU- y otros países del mundo. Eso sin contar las reservas que se encuentran en el Golfo de Venezuela, que se calculan en 1.8 veces más que las reservas comprobadas (es decir, casi 500.000 millones de barriles más). Adicionalmente, la política internacional de Venezuela ha generado un conjunto de asociaciones u organizaciones de nuevo tipo, no alineadas con los intereses de EEUU en la región; entre las que cabe resaltar la CELAC, UNASUR, Banco del Sur, ALBA-TCP entre otras. Sí no fuese suficiente con ello, el accionar de Venezuela, con el liderazgo de Hugo Chávez, ha facilitado la asimilación de un discurso político que hace hincapié en la defensa de la soberanía contra la influencia trasnacional de los EEUU, siendo emuladas sus matrices discursivas en Ecuador, Bolivia, Argentina, Nicaragua, Uruguay entre otras espacialidades de Nuestra América. Por otra parte, el financiamiento y apoyo de grupos opositores al presidente Chávez no ha logrado el objetivo de derrotarlo en otras ocasiones, como sucedió en las elecciones del referendo revocatorio en 2004, las elecciones generales de 2006, o las elecciones de la enmienda en 2009; pero sí lograron hacerlo en las elecciones por la reforma constitucional del 2007, donde el impacto de las OPGUS fue notorio y esencial para lograr inhibir a más de 2.500.000 electores que un año antes habían manifestado su apoyo a Chávez.
El escenario del año 2012 tiene un conjunto de particularidades que hacen presumir un incremento de las OPGUS. En 1er termino, los efectos de presentarse la oposición a Chávez con un candidato único como resultado de la imposición de un proceso electoral interno, que mostró sus resultados el 12 de febrero. En 2do lugar, la existencia de un descontento – tanto en loa alineados en apoyo a Chávez como de quienes se le oponen- por la lentitud de la respuesta burocrática. En 3er lugar, la reaparición del deterioro de salud del presidente. Esas razones se unen y se manifiestan en las matrices que contextualizan el discurso político de Capriles Radonski, como candidato opositor.
El candidato opositor, ha comenzado a hacer uso de la simbología tricolor, a efectos de competirle a Chávez en su campo natural: la defensa de la venezolanidad. Debe recordarse, que el simbolismo se refleja en el nombre del Comando de Campaña (Comando Tricolor) de Capriles. Asimismo, la estrategia de hablar del Progreso como un intento de mimetizar los efectos del capitalismo liberal que apoya abiertamente. Otro elemento característico de esa OPGUS, es el hecho de mostrar su capacidad física, de manera tal de contrastarlo con “un presidente enfermo y disminuido”, buscando con ello lograr el desencanto y desilusión en los electorados claves (estratos Dy E) que han mostrado su decidido apoyo a Chávez. La estrategia de GUS gira en torno al endulcoramiento de la figura de Capriles, mostrándolo como un candidato abierto a todos los venezolanos, buscando con ello “borrar” las imágenes de un Capriles en 2002 violentando una embajada o encabezando arrestos de adeptos o funcionarios de Chávez. Se trata de lograr conquistar a los indecisos o los seguidores populares del presidente, enmascarando el verdadero rostro de un candidato de las elites económicas y políticas del capital trasnacional en Venezuela.
Dr. Juan Eduardo Romero
Historiador
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13/03/2012Historiadorhttp://www.blogger.com/profile/06283244937285398987noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6371381920980036117.post-1032659484240347782012-03-15T10:45:00.000-07:002012-03-15T10:45:26.893-07:00EL DISCURSO DE CAPRILES O FALSEAR LA REALIDAD
Hemos señalado en otros artículos que el discurso expresa más que verbos, predicados o complementos directos. Se expresa una forma de ver la vida, una visión ideológica de la realidad, donde se interpreta lo vívido desde nuestro campo de expectativas y necesidades. El discurso es un mecanismo esencial para lograr el convencimiento. Eso es un aspecto clave del control hegemónico. No solo se puede lograr la dominación mediante un ejercicio físico coactivo o violento, ese tipo de control es momentáneo e inestable, pues toda acción genera una reacción; por eso debemos “convencer” al otro.
Un pensador extraordinario, Michel Foucault, señalaba que como todos los hombres tenemos capacidad del habla, construimos “mecanismos prohibitivos” que hacen que un discurso sea más eficaz que otro. Esos mecanismos, hacen que un discurso se reproduzca y se amplié en el uso colectivo; son entre otros el autor (el especialista que dice o hace sobre un tópico determinado), la verdad-mentira, la razón-locura. Así, un autor reconocido – y por ello los programas de opinión llevan especialistas- dice “algo”, lo que dice es verdad y está basado en la razón. Quién no es un autor autorizado y especializado, no dice la verdad y sus expresiones son una locura. Esa imagen la vimos en un momento en el proceso histórico venezolano, cuando se intentó estigmatizar a Chávez, pues “estaba loco”, era un maniático egocéntrico. Con ello se procuraba iniciar un proceso parecido al que le ocurrió al ex presidente de Ecuador Ortiz Bucarán, que fue juzgado y expulsado de la presidencia por “actos de locura”.
En el caso del discurso de la oposición, desde el inicio del proceso de las primarias, los candidatos dejaron entrever que el ciudadano-presidente basaba su actuación en actos “irracionales”, que producían la exclusión, que dejaba fuera a la “mayoría de los venezolanos”. Asistimos de esta forma, a una estrategia de ocultamiento, mediante la cual se busca falsear la realidad cotidiana. La verdad, es que “los excluidos” (grupos propietarios, grupos económicos, la elite propietaria) han sido los que históricamente han excluidos a los sectores populares; sólo que ahora, la gestión presidencial ha tenido como sujetos protagonistas las poblaciones más humildes y tradicionalmente excluidos – los trillados estratos D y E- y ese cambio en la agenda política no es tolerado. La transformación -a través del discurso del presidente- de los sectores tradicionalmente excluidos en sujetos protagonistas de la política pública ha sido tomada como un “acto irracional”, que debe ser revertido.
Sin embargo, no se anuncia públicamente, pues esos sectores representan el 81% de la población inscrita en el REP. Como no se puede decir públicamente, se disfraza con un llamado a alcanzar todos los progresos y la felicidad. Es el llamado al “capitalismo popular” de María Corina Machado. Se trata de disfrazar la realidad. Eso viene acompañado con el discurso que quienes impulsan el socialismo, son pobres, ignorantes, salvajes y bárbaros. Hay una formulación del “nosotros” y del “ellos” muy claro. El Nosotros – es decir los militantes de la derecha- son civilizados, educados, proclives al éxito como clave del capitalismo. Los “otros” – los socialistas- son violentos, son hordas, proclives a la violencia irracional.
En ese proceso, debe “rescatarse” un discurso de igualdad, pues este gobierno – esa es la tesis del falseamiento de la realidad- ha generado una división que no existía. Esa afirmación es una mentira histórica. Las divisiones sociales existen históricamente desde finales del siglo XVI. Hemos construido una sociedad donde se privilegia el poseer sobre el ser, sólo que los mecanismos de control social – la escuela, la iglesia, la familia, la televisión, los medios audiovisuales- han “invisibilizado” esas divisiones. El gran éxito de Chávez, ha sido hacer evidente las contradicciones sociales que han estado vigentes en el transcurso de la historia de Venezuela. Por eso el discurso de Capriles Radonski, habla de “un camino”, esa vía es la de readoptar el pensamiento neoconservador, donde la oportunidad de superación no viene por el accionar del individuo, sino a través de la “educación”, pero no una educación dialógica – al estilo propuesto por Paulo Freire- sino una educación repetitiva, dominante, subyugadora.
Capriles además ha utilizado la estrategia de mostrarse como un sujeto humilde, tranquilo, dispuesto al diálogo. Esa estrategia se corresponde con un plan destinado a relegar al olvido su accionar violento en los acontecimientos del 12 y 13 de abril de 2002, cuando penetro en espacios territoriales de Cuba – la embajada en Caracas-, procedió a la detención – sin garantías- de funcionarios de Chávez, en fin, dio al traste con ordenamientos jurídicos de conservación de derechos. Se trata de una estrategia que busca obtener beneficios del “chavismo descontento”, ese chavismo popular maltratado por la derecha endógena enclaustrada en el PSUV, que hace negocios, que trafica con las necesidades y que no comparte el proyecto bolivariano. La estrategia discursiva de Capriles va a buscar mostrar su capacidad física, sobre todo ante la recaída en la salud del presidente, se trata de hacer hincapié en que su salud no da para más y que sin Chávez, no hay proyecto bolivariano, buscando crear miedo e inhibir la movilización popular a favor del PSUV, favoreciendo su proyecto neoconservador. Ese discurso será progresivo y debe generar un debate profundo.
Dr. Juan E. Romero
Historiador
Juane1208@gmail.com
3/03/2012
<a href="http://www.elecodelospasos.net/article-el-discurso-de-capriles-o-falsear-la-realidad-101143686.html"></a>Historiadorhttp://www.blogger.com/profile/06283244937285398987noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6371381920980036117.post-91637166820143011662012-02-19T19:25:00.000-08:002012-02-19T19:25:18.621-08:00IRAN-EEUU: LECCIONES PARA VENEZUELAIRAN-EEUU: LECCIONES PARA VENEZUELA
Lo que viene sucediendo con las relaciones entre EEUU e Irán amerita un análisis detallado, por las implicaciones que tiene en el contexto geopolítico mundial y las relaciones en el sistema-mundo. Habría que comenzar estableciendo que la zona del Golfo Pérsico ha sido históricamente un espacio de conflicto, no por la naturaleza exclusivamente religiosa – dada la presencia árabe-islámica que no se puede negar- sino más bien por el hecho de constituirse en un espacio de transición entre tres (3) zonas geográficas de alta movilidad y condiciones geoeconómicas (África, Asia y Europa). Desde la propia expansión del mundo árabe encabezado por Mahoma en el siglo VII, ese espacio de intercambio ha generado una feroz competencia.
La consolidación geoestratégica que procuro Mahoma y que extendió su influencia en ese espacio hasta el fin de la I Gran Guerra en 1919, se vio abruptamente interrumpida por la derrota de los líderes del Imperio otomano – herederos de la supremacía iniciada en el siglo VII- a manos de franceses, ingleses y norteamericanos. Inmediatamente se generó un reacomodo de las esferas de influencia territorial en la zona; es bajo esa figura de reacomodo que veremos el surgimiento y consolidación de los espacios territoriales que hoy confluyen en el Golfo Pérsico: Barheim, Irak, Irán, Omán, Yemen, Emiratos Árabes Unidos (EAU), Kuwait , Arabia Saudita y Katar. Cada uno de estos espacios territoriales se incorporan al juego geopolítico mundial, pero particularmente a partir de la finalización de la II Gran Guerra en 1945, comienzan a orbitar en torno a los intereses geoestratégicos de los EEUU. El motivo: las enormes existencias de hidrocarburos que están presente en la zona y el privilegiado espacio de cruce que tienen en el escenario mundial. La situación en este espacio geográfico de transición fue históricamente tensa, pero esa tensión se ve incrementada a partir del año 1979 por un conjunto de cuatro (4) sucesos que nos permiten entender el contexto actual. El primer suceso, es la caída del Sha de Irán y el ascenso de los Ayatholas de origen shíitas. El segundo suceso, es el triunfo –mediante un golpe de Estado- de Saddam Hussein en Irak. El tercer suceso, es la invasión a Afganistán por parte de la URSS. El cuarto suceso, es la firma del Tratado de Paz entre Egipto e Israel. Todos esos acontecimientos cambian los ya precarios equilibrios de poder en la zona e inicia una escalada de nuevas conflictividades que tienen su punto álgido en lo que hoy sucede.
El 1er suceso, cambia las relaciones y la influencia de los EEUU en la estratégica zona del estrecho de Ormutz, colocando a los ayatholas musulmanes en una posición privilegiada ante los intereses norteamericanos. El triunfo de Hussein, servirá para adelantar un intento de contención de esa influencia, mediante el apoyo – velado o directo- de los EEUU, Francia e Inglaterra, quienes impulsan y apoyan el conflicto Irán-Irak que estallo en la década de los años 80. La invasión rusa a Afganistán, le agrega presión ante la cercanía en el ajedrez político y transforma la zona del Cáucaso en un espacio de discusión, que aún hoy se mantiene. Los acuerdos de paz, transforman a Egipto en un aliado de los EEUU en la zona del Magreb Africano hasta el día de hoy. Sin embargo, el fracaso de la guerra Irán-Irak, generó el surgimiento de una fuerza no estimada en la figura de Saddam Hussein, que se transformó en una nueva preocupación para los intereses geoestratégicos de los EEUU en la zona. Por ello, luego de la derrota soviética en Afganistán, con el apoyo de los EEUU a extremistas islámicos, ese espacio sufrió otro cambio que ponía en riesgo la tradicional hegemonía norteamericana. Por ello a inicios de los años 90, se plantea el Proyecto para el Nuevo Siglo Americano (PNSA) que pretende reacomodar la influencia de los EEUU en la zona y controlar las reservas de petróleo. Ese proceso comienza con la invasión a Irak – I Guerra del Golfo en 1991- pero no será completado hasta el definitivo derrocamiento de Saddam en 2004, que viene precedido por la invasión y derrocamiento de los Talibanes en Afganistán en 2002.
Lo que planteamos, es que en ese escenario de repolarización que adelanta los EEUU mediante el PNSA, era necesaria una escalada del conflicto y ello se traduce en convertir a Irán, que es la única pieza del rompecabezas estratégico que sigue en pie, en un objetivo militar Para ello, toman como excusa el desarrollo del programa de enriquecimiento de uranio por parte de Irán alegando violación de convenios internacionales asociados a la no proliferación de armas nucleares. Sin embargo, se obvia que los EEUU viola tratados internacionales también como el de Kyoto, el estatuto de Roma sobre la Corte Penal Internacional, la Comisión de Armas Químicas entre otros. Desarrollan el financiamiento de resistencias internas que fracasan y optan por una salida militar, directa o indirectamente a través de Israel. Detrás de todo, está el hecho de controlar la OPEP – hay que recordar que tienen presencia con los cambios en Libia e Irak, aparte de contar con EAU, Arabia saudita, Kuwait y Qatar- y con ello los precios de los hidrocarburos, todo ello porque los EEUU gasta más de 15 millones de litros de gasolina para mantener su aparato militar y eso representa casi 30 millones de US$ diarios. El accionar de los EEUU es una advertencia para Venezuela, Perú, Colombia, Ecuador y Bolivia, por ser estos países los únicos con reservas estratégicas no intervenidas por EEUU a través del PNSA.
Dr. Juan E. Romero
La Universidad del Zulia
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10/01/2012Historiadorhttp://www.blogger.com/profile/06283244937285398987noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6371381920980036117.post-69425765194979802082012-02-19T19:21:00.001-08:002012-02-19T19:21:39.082-08:00HISTORIA INMEDIATA: UNA OPCIÓN A LA HISTORIA TRADICIONALHISTORIA INMEDIATA: UNA OPCIÓN A LA HISTORIA TRADICIONAL
En estos momentos, Maracaibo se convierte en la sede del debate historiográfico más importante dado en el país. La realización por el Grupo Historia Inmediata Maracaibo (HIM) del II Congreso Internacional de Historia Inmediata se traduce en un espacio de encuentro y reflexión sobre el papel de la historia.
Tradicionalmente, la historia ha sido asociada como simple relación del pasado. Esta semántica narrativa-descriptiva ha generado en la historiografía venezolana un conjunto de trabajos de diversa índole, todos marcados por la centralidad en el tema de lo político-militar. Lo que prevalece en un balance de los trabajos de investigación y publicaciones, es el tema de las elites políticas, económicas y sociales. Temas como los intelectuales en, los grupos económicos, el pensamiento político de son ejemplos de los abordajes realizados por una historiografía que se plegó a los temas que refuerzan las estructuras de control social. Ante esta realidad, sobre todo a partir de la publicación del Manifiesto Historia a Debate (2001) comienza un tránsito, del cual forman parte en el Zulia investigadores de la talla de Roberto López, José Luís Monzant, Farido Caldera, Angel Rafael Lombardi, Jonny Alarcón, Juan E. Romero entre otros, quienes abordan el problema de lo actual, lo inacabado.
Ese abordaje, desde el punto de vista teórico-epistemológico se traduce en un distanciamiento con dos supuestos esenciales de la historia intelectual del Siglo XX: el determinismo del documento de archivo y el tratamiento acerca de las elites. La historia inmediata, asume que el historiador tiene un compromiso ideológico. Su propia existencia es una manifestación de su existencia ideológica, que no puede ser negada y menos escondida bajo el manto protector de la “IMPARCIALIDAD CIENTÍFICA”. El historiador de lo inmediato asume su identidad y compromiso ideológico, escudándose en la única vía posible: plantearse el problema de lo coetáneo, lo que se está desarrollando bajo un enfoque transdisciplinar.
La transdisciplinaridad, va más allá de simple encuentro entre la historia, la ciencia política, la economía, la sociología, la demografía, la geografía o cualquiera de las otras disciplinas. Se trata no sólo de encontrarse en la preocupación del abordaje, sino de avanzar en reconceptualizaciones epistemológicas a partir de las cuales vemos la propia realidad, no como una concreción definitiva sino como un horizonte cambiante al cual debemos descifrar. Eso permite abordar temas muy variados, desde el análisis del discurso, la economía, la historia, posibilitando el análisis y comprensión de lo que está sucediendo en el mundo. En el caso de Venezuela, la adscripción de estos investigadores nombrados inicialmente al Grupo de Historia a Debate, que dirige Carlos Barros en la Universidad de Santiago de Compostela y que agrupa a más de 3000 historiadores en todo el mundo, con un fuerte acento en Latinoamérica, genera un espacio de renovación historiográfica que avizora una verdadera revuelta en la historia.
El historiador de lo inmediato, asume una relación triple, que supera el binomio clásico pasado-presente. Plantearse como se hace, la relación pasado-presente bajo el concepto de campo de experiencia, que refleja los aportes que las dinámicas de vida proveen en el propio desarrollo de lo humano, conjugado con el concepto de horizonte de expectativas, que articula la relación presente-futuro, genera que los aportes historiográficos que se hacen, den una respuesta a los problemas actuales que el historiador tradicional no pretende alcanzar.
Esta posibilidad que la historia inmediata da, permite que en el Congreso que se desarrolla en la Facultad de Ciencias de la Universidad del Zulia, hasta el pasado viernes 18 de marzo, se aborden temas como la historia inmediata, América Latina 1980-2010, la crisis del capitalismo en el Siglo XXI, el Socialismo del Siglo XXI como alternativa al colapso capitalista, Movimientos indígenas y afrolatinoamericanos del Siglo XXI, Procesos identitarios en Latinoamérica, Papel de la Ciencia y la tecnología en los Modelos Socio-productivos de América Latina. Todo ello con la participación de más de 130 personas entre estudiantes y profesionales, con la participación de investigadores de la talla internacional de Margarita López Maya, Reinaldo Rojas, Jordi Canal, Pablo Pozzi entre otros.
Más allá de este dato numérico, lo importante de la actividad es que se genera un debate sobre la historia que tiene dimensiones teóricas y metodológicas enormes. Se está no solo debatiendo sobre como investigar, sino que se presenta además el resultado de estos enfoques y el impacto que tienen en el compromiso por comprender nuestras realidades en constante transformación. Se trata de un momento clave en el desarrollo de los estudios históricos en Venezuela y Latinoamérica, donde se traza un diseño que debe impactar tanto las estructuras formales de los departamentos, centros e Institutos de Investigación Histórica, así como los colectivos sociales y su constante preocupación por interpretar una realidad muy movida y contradictoria. La historia inmediata tiene su espacio bien ganado en estas tierras¡¿
Dr. Juan E. Romero
La Universidad del Zulia
Historiador
Juane1208@gmail.com
16/03/2011Historiadorhttp://www.blogger.com/profile/06283244937285398987noreply@blogger.com0